Joder, no esperaba que la publicación anterior fuera tan buena, con 1600 vistas y varios comentarios creo que puedo decir que fue un éxito...
Por mientras disfruten de la continuación de esta historia de idols.
— ¡Eres la mejor, Raptorina! —dijo un fan extendiendo la mano.
— Sí, muchas gracias por venir —respondió una idol rubia sujetando la mano del hombre.
Tres lindas idols, cada una en una mesa distinta, saludando a sus fans.
— Mmm, lo están haciendo muy fácil…
Desde unas barandillas del segundo piso, una mujer trajeada observaba a las dulces chicas saludando a sus fans, apuntando hacia ellas con un control mientras sonreía con malicia.
— Nghh…
— Ann…
— Nmm…
“¿Pasa algo”
Fue la pregunta que surgió en cada mesa al ver a sus idols jadear momentáneamente.
“No, estoy bien”
Fue su respuesta mientras recomponían su actitud y buscaban con la mirada a la persona que había hecho tal acción.
Su manager.
Una mujer de corto cabello rubio, de pechos grandes que hacen sinergia con su trasero, de piel morena y ojos grises, vistiendo un traje de oficina pero…
En su cabeza había orejas y en su trasero una cola, ambas de gato.
De hecho, las chicas también estaban usando orejas y colas de gato.
Era el grupo “Kats”, el tercer grupo de idols bajo el mando directo de Futura.
Compuesto por tres idols: Raptorina, Aegis y Jackeline.
Las tres estaban dando lo mejor de sí mismas para mantener la compostura ante los pequeños orgasmos constantes que estaban sintiendo en sus entrepiernas, de hecho, si no fuera por las mesas cubiertas por manteles y las sillas que les permiten estar sentadas durante el evento, los fluidos saliendo de su entrepierna podrían ser vistos fácilmente o ya hubieran perdido el equilibrio.
Y después de un largo evento de saludo con los fans, llegó la hora de la venganza.
— ¡Ahh!
La manager que estaba sonriendo viendo a sus idols desde abajo ahora estaba siendo cogida por estás
— ¡Maldita furra, vas a pagar caro! —gritó la rubia.
— Ahh~ vamos chicas~ les gus-mmm~
La manager fue interrumpida por un dildo entrando en su boca.
— ¡Cállate, como si vestir como gatas en los conciertos y perdernos la bienvenida de la nueva no fuera suficiente también sales con tus jueguitos! —se quejó Jackeline.
Boca, vagina y ano; cada uno de ellos teniendo un dildo dentro, cada uno con arnés, y quienes movían los dildos eran las idols de Kats.
Normalmente es el manager quien tiene control sobre el grupo, pero Kats era un caso especial, sus idols eran tan unidas que si lo querían podían cambiar de manager sin muchos problemas. Incluso cierta entrenadora de cabello blanco tampoco se salvó de su trabajo en equipo.
Sin embargo, está manager era la única que ha podido soportar la intensidad del trío, volviendonse un círculo vicioso de “tú me coges, yo te cojo”.
— Ahh… dildos les van a fal-mm
— ¿Quién te dijo que podías hablar-ahh~ —Jackeline sintió los dedos de la manager entrando en su ano— Furra rastrera, no creas que… oh… d-de…
Jackeline, quién tenía a la manager devorando el dildo unido a su entrepierna, empezó a titubear ante el placer de los dedos de la manager en su ano, soltandola momentáneamente.
Pero eso fue más que suficiente.
— ¡Mmm!
La manager se movió de tal forma que abrazo a la rubia que estaba usando su vagina…
Y la besó.
— ¡Mmm~!
Pero no solo la besó, aprovechó para jalar de sus senos, haciendo que se echará para atrás por reflejo.
— Je… Gatitas… si van a morder~ entonces háganlo bien~
Jess, la manager de Kats, miraba triunfante al dominar a las chicas.
— ¡Todavía no terminamos!
La lucha por dominar siguió su rumbo de siempre.
…
Sede ITG, varios días después de la fiesta de bienvenida de Levi.
*Sonidos de madera siendo golpeada*
— ¡Vania, abre la puerta! —Miku gritaba frente a la puerta del dormitorio de la idol albina— ¡Ya han pasado tres días! ¡Es hora de que salgas!
— Creo que será mejor dejarla sola…
Las chicas decidieron darle su espacio a su compañera, y entonces.
*Sonido de puerta abriéndose*
Su compañera salió rápidamente.
— Vani-
— ¡Quítate de mi camino!
La albina no dudó en empujar a sus compañeras.
— ¡Oye! ¡Vuelve!
Las chicas quisieron detenerla, pero era ágil, solo Brenda y Miku podían seguirle el ritmo.
— Alto —Brenda agarró del brazo a Vania.
— ¡Que me sueltes!
Vania trató de usar el peso de su compañera para lanzarla al más puro estilo de las artes marciales, pero Brenda aterrizó bien.
— Oye, sabes que no debes usar las artes marciales contra tus compañeras.
— Y mis compañeras no deberían entrometerse en mis problemas.
— Tienes razón, pero incluso nosotras tenemos algo de humanidad, ¿sabes? —habló Miku.
— ¡Vania!
Las otras chicas habían llegado.
— ¡Esto no les concierne!
Vania se subió a uno de los autos y lo encendió rápidamente, acelerando a toda prisa.
— ¿Qué rayos le pasa? —preguntó Jessica al ver su actitud.
— Lo sabremos si la seguimos.
……
*Sonido de puerta abriéndose*
— ¡¿Cómo está?! —Vania preguntó desesperada.
— Tranquila, está estable, pero el tiempo que estuvo detenido su corazón aumentó en dos minutos, tendremos que hacerle un chequeo médico, necesito que firme aquí —el médico le dio un documento.
— … Podrían dejarnos solos…
— Claro, puede firmarlo después, señorita.
El médico y la enfermera salieron de la habitación.
— Mierda… mierda…
La chica se derrumbó en el suelo, entonces sacó un tubo con un líquido morado de su bolsillo.
“Su corazón se detuvo por un minuto, pero no sabemos si estas pausas irán aumentando con el paso del tiempo”
Las palabras del hombre que la hizo pasar una experiencia horrible resonaron en su cabeza.
— No quiero esto… Diego… ¿Qué debo hacer…? ¿Me perdonarás cuando despiertes…? ¿O me odiaras por el resto de tu vida…? ¿Para qué trabajé tanto entonces…?
La chica se empezó a cuestionar a sí misma, viendo el destino de su amigo, su tiempo como idol y juguete sexual parecen haber sido en vano, se sentía completamente desesperada…
— Así que esta es tu razón de ser idol…
Miku habló desde la puerta.
— Sí, lo es… ahora que lo saben, ¿pueden dejarme sola? —Vania habló desanimada.
— Oye, ese tubo morado… ¿Es lo que creo que es…?
El líquido morado en el tubo, algo que toda idol de Futura reconocería fácilmente, pues se les fue dado antes de renacer como las hermosas chicas jóvenes que son ahora.
— Tú… ¿Planeas dárselo…? Ya sabes lo que le espera…
— ¡Ya lo sé! ¡Yo misma lo he vivido! ¡¿Pero entonces qué se supone que haga?! ¡¿Dejarlo morir?! ¡¿Hacerlo pasar por lo mismo que nosotras?!
Vania no dejaba de gritar desesperadamente.
Hasta qué.
— Oye, tranquila
Brenda y Jessica la abrazaron.
— Dale la sustancia en el tubo, nosotras nos haremos cargo.
Vania miró detrás de ellas dos, ahí estaban las otras tres chicas haciendo gestos de apoyo y con una sonrisa que decía que todo estaría bien.
Sin embargo.
— Emm… ¿Cómo se supone que se da está cosa…?
— Uh, yo recuerdo —respondió Niko— Primero rompes la punta y luego lo conectas a la manga que le está dando el líquido ese… creo así era.
Niko se acercó al paciente, específicamente al soporte para goteo, desconectando el suero que se le estaba suministrando.
— Dame el líquido —Niko extendió la mano.
Vania, todavía dudando, le dio el tubo.
Y fue como ella dijo, rompió la punta y la conectó a la manguera.
Todas vieron cómo el líquido bajaba lentamente a través de esta.
— Supongo que te dejaremos a solas
— Gracias…
— ¿Eh? No, esperen, yo- kgh
Jessica, quien tenía curiosidad por ver qué tipo de chica sería, no pudo ocultar sus intenciones, pero fue sujetada por Brenda y arrastrada por todas las demás.
Y entonces sucedió.
El cuerpo del hombre en la cama empezó a cambiar lentamente; su cabello pasó de un tono café a uno rosado así como a crecer incesantemente, los rasgos masculinos en su rostro se fueron también, tallando lentamente un hermoso rostro femenino.
“Diablos, es lindo”, pensó Vania.
Su cuerpo también se fue transformando, sus extremidad se encogieron y el vello corporal en estás fue cayendo de estás hasta dejar una piel joven suave y reluciente, sus dedos se volvieron más finos y sus muslos se ensancharon para hacer juego con un buen trasero. En su pecho, donde no había absolutamente nada, comenzaron a emerger dos protuberancias que empujaban la ropa de paciente que llevaba hasta formar una firme copa G, y encima de estas se podían notar dos pequeñas bolitas, eran sus pezones. Y en su entrepierna, el órgano masculino empezó a expulsar semen y orina que estaba retenida mientras se iba encogiendo poco a poco hasta quedar un virgen órgano femenino.
Una belleza femenina había nacido, su cuerpo había quedado como nuevo, incluso la agujas que le suministraba el líquido fue expulsada.
— Lo siento… Ren…
Sin embargo, la idol albina no estaba feliz, solo podía mirar a su amigo… o quizás ahora “amiga”, mientras las lágrimas salían de sus ojos.
Pero.
— Ah…
La “chica” en la cama abrió los ojos.
— ¿Dón… de es…toy?
— ¡Ren!
Vania abrazó a su amigo quién recién había despertado, pero.
— Woah… Disculpa… quien… ¿Eh? Mi voz
Ren notó lo aguda que sonaba su voz ahora, distinta del tono al que estaba acostumbrado
— Estoy tan feliz de que hayas despertado
La albina decía mientras lo abrazaba y lloraba.
— Uh… Disculpa… ¿Quién eres…? ¿Y por qué mi voz suena así…?
— … Mira… abajo…
— Aba… jo… ¡Wow!
Ren se sorprendió de los grandes senos femeninos que colgaban de su pecho.
— ¡¿Es alguna especie de broma?! ¡¿Manuel planeó esto?!
“¡Ngh!”
Fue el sonido que salió de su boca al apretar las bolas de carne en su pecho pensando que era una broma y podría quitarse sin problema alguno.
— ¿Manuel…? S-sé que estás por aquí… Es una broma de muy mal gusto, ¿s-sabes? —Ren se ponía más nervioso con casa cosa que pasaba.
— No es una… broma…
— ¿Ah? Cierto, tú… ¿Quién eres?
— …
Vania desviaba la mirada mientras guardaba silencio.
— ¡Ya sé! ¡Debe ser un sueño! ¡Entonces solo tengo que buscar la salida para poder despertar!
Ren se levantó de la cama, pero…
*Sonido de golpe*
— ¡Auch!
Cayó al suelo debido a su nuevo equilibrio, con su rostro pegando al suelo y con sus nuevos senos amortiguando el mayor impacto, dejando en alto su enorme y redondo trasero mientras exponía su órgano femenino… Una escena que destrozaba a la chica de cabello blanco que lo había dado todo para curar a su amigo.
— No es un sueño… —Vania habló en voz baja y con lágrimas en los ojos.
Pero no fue escuchada.
— Ah… ¿Por qué mi cabello es tan largo… y rosado…?
Al contrario, la “chica” seguía procesando, tratando de levantarse mientras veía el largo cabello rosado obstaculizando su vista.
Y entonces.
— Oye… ¿Dónde estoy?
No hubo respuesta de la albina, solo se acercó silenciosamente.
Y la abrazó.
— Ren… ¡Ren! Estás despierto…
La pelirosa estaba confundida, no sabía quién era la chica que lo abrazaba, ni mucho menos por qué sabía su nombre. Aunque extrañamente su abrazo se sentía familiar.
— Muy bonito, señoritas, no quiero interrumpir su reencuentro pero tenemos que hablar de negocios.
Interrumpió un monitor andante y que cuya pantalla tenía un rostro caricaturesco de un hombre rubio.
— Síganme y no me hagan esperar.
El monitor empezó a moverse.
La albina tomó de la mano a la pelirosa.
— … Sígueme…
— Espera, ¿Qué está pasando?
Ren preguntaba sin entender lo que pasaba.
— … Si aprecias la vida de Manuel, entonces sígueme…
Ren fue guiado de la mano por Vania, como si de un niño pequeño se tratase.
Pero.
— … ¿Eh…?
Fue entonces que Ren vio el tenue reflejo en las ventanas de los pasillos, viendo el reflejo de la chica que lo guiaba… Viendo que su reflejo era ahora el cuerpo curvilíneo de una chica de grandes pechos, gran trasero y un largo cabello rosado.
— ¿P-Por qué soy… una chica…?
— … Si te dijera que… tu amigo, Manuel… es el culpable de ello… ¿Qué harías…?
— Supongo que primero escucharía su explicación…
— Supongo que es un alivio…
— Oye, todavía no me has dicho tú nombre
— … Lo sabrás pronto… Por ahora… sigamos…
Ambas chicas caminaron por los pasillos, dando a Ren la oportunidad de sentir las nuevas sensaciones que su cuerpo femenino le otorgaba; el frío aire golpeando la piel expuesta de la bata de paciente, el largo cabello revoloteándose por su cuello y espalda, el peso de sus pechos así como el balanceo libre de estos por no llevar un sujetador; cosa que lo llevaba a sentir el como sus pezones se frotaban contra la tela de la bata.
Todo era nuevo para Ren que siempre había sido un hombre.
Finalmente llegaron al estacionamiento subterráneo, allí subieron a una limosina y dentro estaba aquella pantalla que les había llamado.
— Finalmente llegan, me alegra que hayan sido unas chicas obedientes.
— Uh… Soy un chico…
— Ya no más, querida, ahora eres propiedad de Futura, y eres todo un bombón, te venderás muy bien, no lo crees… ¿Manuel?
— ¿Eh? Pero Manuel no está aquí —Ren volteaba en todas direcciones buscando a Manuel.
— Oh, ¿No te lo ha dicho? Manuel está a tu lado justo ahora.
Ren miró a su lado entonces, viendo a Vania con una expresión triste.
— Si… yo soy Manuel…
“Manuel”
El antiguo nombre de la chica de largo cabello blanco, el nombre que portaba cuando todavía era un hombre, el nombre que era suyo antes de tratar con Futura.
Y Ren, que quería negar que la linda chica a su lado era su mejor amigo, simplemente no pudo hacerlo al verse a él mismo convertido en una chica también.
— ¿Difícil de procesar, no es así? Bueno, no importa, Manuel tendrá mucho tiempo para explicarte.
— ¿Qué hay de mi familia, de nuestras familias?
— Tranquila, sus familias firmaron acuerdos de confidencialidad, con encuentros familiares una vez al mes.
— ¿Y han ido a visitarme?
— No me corresponde a mí responder esa pregunta, ahora —una hoja salió de uno de los asientos— Firma el contrato.
— ¡Espera, dijimos que nada de contratos! — Vania habló en voz alta.
— Señorita Vania, acordamos que no se haría un contrato con el señor Ren. Pero debido a la infracción del contrato por su parte entonces se debe establecer uno nuevo.
— ¡¿Eh?! ¡Pero yo no rompí ningún acuerdo!
— Claro que lo hizo, al suministrar de forma ilegal la sustancia CS3X0 en su amigo, nos vi-
— ¡¿Pero de que hablan?! ¡Si fue el propio Sei quien me dio el líquido!
— Sei se ha dado a la fuga con varios contenedores
— ¡Ese maldito hijo de puta! —Vania apretó los puños con fuerza.
— El punto es que al hacer eso ha involucrado a su amigo de forma no autorizada. Pero no todo es malo, tratando de respetar el contrato anterior puedes hacerte responsable de él acortando tu salario, o en este caso, aumentando tu salario un 30% ya que para cubrir la cuota del hospital pagabas un 80% de este.
— ¡¿En serio?!
Vania se sintió aliviada.
— Pero, de igual forma tu amigo tendrá que venderse, aunque no lo hará en la misma frecuencia que las chicas de Futura a no ser que él, o en este caso, ella lo pida.
Y el alivio que sintió se fue tan rápido como vino, si bien ella se había adaptado a su nuevo cuerpo y a su nueva vida como una idol ante el público y un juguete sexual en privado, no quería que su amigo pasara lo mismo, no quería que terminara como ella.
— ¿P-podría darme tiempo para procesarlo…?
— Ah, ya veo, muy bien, tendrás una semana. Señor Manuel, no, señorita Vania, si logra convencer a su amiga, la señorita Sasha, entonces la reducción de su salario será tan solo del 25%.
La pantalla se apagó, dejando a las dos chicas en el auto con un silencio incómodo mientras este seguía en movimiento.
— ¿Por qué me dijo “Sasha”? ¿Manuel?
— Mierda… Escucha… sé que tienes muchas preguntas… pero no creo poder responderlas por ahora…
— Vaya… realmente la debiste pasar duro mientras dormía…
— Espera… ¿Realmente crees todo lo que dijo?
— ¿No es el hecho de que ahora tenga estás cosas colgando prueba suficiente? —Ren apretó sus pechos mientras lo decía— ¿Entonces…?
— Solo… dame tiempo…
— En lo que esperas a decirme, ¿podríamos comprar algo de ropa? Andar en las ropas de hospital es… incómodo… mierda, todo se siente tan raro…
— También va a tener que esperar, de-
— Ya pueden bajar.
Era el estacionamiento de la sede de ITG, con la manager lista para recibirlas.
— Vania, tu y yo tenemos que hablar, Brenda llevará a tu amiga a tu habitación, estarás compartiendo piso con ella de forma indeterminada.
— ¿Eh? Pero yo-
— ¡Sin peros! Jessi, llévatela
Jessica tomó a Ren de la mano, alejándose rápidamente de la manager.
Y una vez quedando solas.
— Escucha, sé que estás en contra de vender a tu amigo, pero será mejor que lo hagas, Futura nunca pierde, tú debes saber eso perfectamente, todas lo saben perfectamente, ¿O acaso quieres repetir el caso K?
Val rompió el silencio.
— No, pero…
— ¡Entiende! ¡Negarte no es una opción! Por tú bien y el bien de tu amigo, haz que acepte… Y ni se te ocurra escapar, morirás antes de poder poner un pie afuera del edificio… Puedes irte.
— ¿Es todo?
— ¿Qué? ¿Acaso también quieres que te regañe por el peligro en el que nos pusiste a todas al portar ilegalmente el líquido cambia sexo?
— …
— Ahora vete antes de que Jessica se coma a tu amiga o yo cambie de opinión.
Vania se fue corriendo para alcanzar a Ren, esperando que Jessica no hiciera alguna perversión.
Para su suerte no habían llegado muy lejos.
— ¡Yo me encargo desde aquí! —dijo Vania tomando a Jessica del hombro.
Jessica no dijo nada, simplemente mostró una sonrisa y se retiró en silencio.
Entonces Vania retomó la tarea de Jessica, llevar a Ren a su habitación.
— Ah… qué cansada estoy…
— Wow, incluso en tu privacidad hablas en femenino… ¿Cuánto tiempo estuve dormido?
— Toma asiento… será una larga historia.
Vania empezó a contar lo sucedido.
Para “ella” todo empezó hace 3 años atrás, cuando la familia de Ren optó por dejarlo morir debido a las altas facturas médicas. Manuel se negaba completamente a ello, asumiendo la responsabilidad de las facturas, sin embargo, el coste fue más grande de lo que su bolsillo le permitía soportar, terminando completamente endeudado y desesperado.
Fue ahí donde apareció Futura, con un contrato que lo sacaría del agujero dónde estaba.
Era un contrato bastante “simple”, su vida pasaría a ser propiedad de Futura, y estos pagarían sus deudas y solventarían los gastos médicos.
En este explicaba que sería participé en el “Proyecto ITG” y que se le pagaría por ello.
Pero la cosa se puso rara cuando se le pidió que contestara una encuesta con los rasgos que le gustaría ver en una chica, solo para ser llevado a un extraño laboratorio y ser metido a una extraña cápsula, siendo lo ultimo en ver un liquido rosa siendo drenado la capsula.
Para cuando despertó se dio cuenta de se había convertido en la chica con los rasgos que había señalado, incluso le dieron la libertad de nombrarse.
Es ahí donde surgió ”Vania”, la idol novata que debutó para el grupo ”Girlys Love”, conociendo a las otras “chicas” y descubriendo que también estaban en la misma situación que él, aunque desconocía sus motivos.
— Y así es como terminamos aquí… convertidos en lindas chicas… dios, me siento tan libre de confesar.
El peso de sus preocupaciones disminuyó, se sentía un poco liberada.
Y entonces
— Lo siento… Sí que haz sufrido por mí…
Ren abrazó al amigo que no había visto en un largo tiempo.
— … ¿No estás… enojado…?
— Sacrificaste tu masculinidad por mí, ¿por qué debería estar enojado? Al contrario… gracias, fuiste el único que no me abandonó.
— Oye, por un amigo se hace lo que sea… Bien, es hora de que te quites esa ropa de paciente, de hecho yo también tengo que cambiarme.
Ambos se separaron.
Y Vania, por reflejo comenzó a quitarse la ropa.
— Vaya, no dudas en mostrarme las tetas, que gran amigo eres… no están nada mal~ —Ren miraba fijamente los senos de Vania.
— No sé qué me miras si quien las tiene más grandes eres tú.
— Si pero una chica a medio cambiarse es bastante sexi… ¿Puedo chuparlas…?
— ¿Sabes que por dentro soy Manuel, cierto?
— ¿Y? Lo que yo veo es una sexi chica de cabello blanco y un buen par de tetas
— Lo mismo aplica para mí
“Ambas” sabían hacia donde iba la cosa.
— ¿Entonces qué dices, me ayudas a explorar mi nuevo cuerpo?
— Diablos, ¿Cómo puedes aceptarlo tan rápido? A mi me costó un buen.
— Bueno~ cuando pasas dormido varios años y al despertar ves una chica linda… digamos que me estoy dejando llevar por el calor. Además, sirve que por fin tocas a otra chica que no seas tú.
— Idiota, he tocado otras chicas también.
— ¿Es así? Quién lo diría, el Manuel soltero es todo un mujeriego después de volverse una mujer, ¿Por qué no me enseñas tus técnicas~?
— En serio, ¿Cómo puedes estar tan tranquilo después de convertirte en una mujer?
— Ya me conoces, sabes que siempre he sido de tomar las cosas positivamente… aunque sí, esto es todavía difícil de digerir. Hasta hace unas horas era un hombre dormido, incluso mi cuerpo no se siente como si hubiera estado en cama tanto tiempo.
— Bueno, eso es porque nuestro cuerpo es modificado a nivel celular, recuperando por completo cada órgano desgastado.
— ¿Incluso el cerebro? ¿Entonces voy a empezar a querer chupar penes?
— Bien, ya que quieres hablar sin filtros, pronto empezarás a desearlos, incluso verás al sexo opuesto con otros ojos.
— Espera, ¿Me viste atractivo cuando me veías dormir?
— ¡N-no voy a responder a eso!
— Vaya, incluso afecta al cerebro, entonces pensamos con chicas adolescentes de… mmm ¿17?
— Un poco, todavía tenemos los conocimientos de nuestras antiguas vidas.
— Fua, podré darle uso a la fórmula general y a la programación en Java.
— Y a las derivadas.
La conversación humorística de ambas chicas seguía su rumbo hasta que.
*Tono de alarma*
La alarma en el teléfono de Vania interrumpió el calido momento entre el par de “amigas”.
— Rayos, tengo que entrenar.
El reloj había marcado las tres de la tarde, era la hora en la que iniciaban las sesiones de entrenamiento de las idols.
Vania, que ya estaba en ropa interior, se empezó a cambiar con ropa deportiva; unos legins y un top deportivo.
— Toma, también vístete.
Le dio un conjunto deportivo también, así como ropa interior, la cual se puso sin dudar.
— Wow… la sensación de la ropa interior femenina es… Oh —Ren estiró los laterales de esta contra su vagina— Ohh…
— Ya habrá tiempo para cosas sucias después, solo apúrate, no puedo faltar.
— Te lo tomas muy en serio esto de ser idol
— ¿Y de quién crees que es la culpa?
Ren se quedó callado y siguió cambiándose, pero…
— Emm… ¿Me puedes ayudar…?
No podía ponerse el sostén.
— Date la vuelta.
“¡Ngh!”
Ren se dio la vuelta y la albina le puso el sujetador, pero al ser de la medida de los senos de Vania este le quedaba un poco apretado, haciendo presión a la hora de abrocharlo.
— Eso fue tan femenino, Sasha~
— Cá-cállate… y no me llames Sasha, no me llamo así.
— Lo es según el contrato.
— Pero todavía no lo firmo.
— Pero lo firmarás. Ahora, andando.
Ambas chicas salieron de la habitación y caminaron hasta la sala de entrenamiento.
— Vaya, nunca pensé que Vania llegaría tarde —una de la chicas dijo en tono de burla al ver a Vania llegar.
— Eso no importa, ¿Quién es la nueva? —Miku preguntó.
Todas se acercaron al par y las rodearon como si fueran niños viendo algo nuevo para ellos.
— Manuel, ¿Me vas a presentar a tus amigas? —Ren habló.
— ¿Te llamas Manuel?
Todas se sorprendieron, desde que entraron, ni una sola de ellas había revelado su verdadero nombre; el nombre que portaban cuando eran hombres.
— Gracias, Ren
— Vaya, no dudas en apuñalarlo rápidamente, deben ser muy buenas amigas —Jessica habló— ¿Me la prestas~?
Ren se presentó ante las chicas, quienes empezaron a contarle todas y cada una de las cosas que Vania había hecho por él. Ella quiso detenerlas pero fue retenida por Miku y Brenda, incluso amarrada y amordazada. Trató de safarse pero su espíritu de lucha iba disminuyendo con cada vergonzosa y lasciva anécdota que le contaban a Ren.
— Vaya… vaya… ¿Hiciste todo eso por mí?
— Mmm… —Vania no expresó nada, solo tenía una cara roja.
— Y todavía hará más.
Una voz sonó detrás de todas las chicas, era la manager, llevaba un documento en su mano.
— Sasha, fuiste solicitada por uno de nuestros clientes.
— ¿Te pusieron Sasha? Que lindo nombre~
— ¿Sasha? —Ren preguntó extrañado.
— Sí, esa eres tú ahora. Así que alístate, esta noche perderás tu virginidad, pero no te preocupes, Vania te hará compañía, incluso te enseñara una o dos cosas del sexo femenino.
Ren estaba aturdido ante lo dicho por la manager.
— Tranqui… la… Tu mejor amiga te ayudará en esto…
Y Vania, a quien desataron al ver a la manager, solo le pudo dar tales palabras.
…
— Oye, Manuel… ¿Estás seguro de esto…?
Una pelirosa vistiendo un vestido corto bastante revelador, medias y guantes largos, se detuvo antes de cuestionar a la chica que tenía delante, también vistiendo las mismas prendas.
— Se que te aterra, pero no tienes opción, además, ya te dije que no me llames Manuel. ¡Vania! Tienes que llamarme Vania, ese es mi nombre ahora, ¿Me entiendes, Sasha?
— ¿Qué rayos te pasó…?
— Temo por lo que nos pueda pasar.
— Vamos, no estamos en México dónde podemos acabar en bolsas de basura junto al rio
— Ese destino se queda bonito junto a lo que nos espera… luego te contaré del incidente K… Pero por ahora…
Sin previo aviso, la albina besó a la pelirosa, pero no solo eso, su mano derecha se dirigió a su zona íntima mientras que la mano izquierda fue por sus senos.
— Mmm~
Las dudas de la pelirosa rápidamente fueron reemplazadas por el calor invadiendo su cuerpo.
La lengua dentro de su boca, la mano apretando sus senos, la mano frotando su entrepierna a través de la tanga; todo le estaba impidiendo pensar.
— Ah…
Los labios se habían separado, dejando un puente de saliva antes de romperse.
— ¿Qué… qué fue eso…?
— Placer femenino, Sasha… Pero solo es el comienzo… Solo haz lo que yo haga… ¿Sí?
— Sí…
— ¿Sí qué?
— Sí, Ma… Vani… a…
Ambas chicas caminaron un poco más antes de llegar a la puerta de la habitación donde las esperaban.
*Sonidos de puerta abriéndose*
— Ah, llegan justo a tiempo~
Dentro de la habitación había seis hombres, todos desnudos, esperando por el par de hermosas “chicas” que habían contratado.
— Sí sí, tres para cada una.
Vania, ya estaba en posición, incluso de rodillas y lista para satisfacer la tercia de penes pero…
— ¡Oye, Vania, tu amiga no se mueve!
Los hombres a cargo de Sasha se quejaron, pues Sasha ni siquiera estaba incada como Vania, estaba de pie, inmóvil, nerviosa.
— Ah… chicos, ¿me pueden esperar un momento?
Los hombres rodeandola asintieron tranquilamente, así que se puso de pie de nuevo y se acercó a Sasha por la espalda.
*Golpe*
El clásico rodillazo a la corva fue dado por Vania a Sasha, quien cayo al piso por no esperar tal cosa.
— ¡¿Eh?! ¡Man-mmm!
Sasha estaba por hablar pero fue detenida por los dedos de Vania entrando a su boca mientras con su otra mano apretaba sus pechos, seguido de eso, ella se acercó a su oído.
— Oye, ya te dije que soy Vania, tu sexi y candente novia~ —Vania susurró con un tono seductivo.
Los penes de los tipos reaccionaron a lo que estaban viendo, e impacientes, comenzaron a masturbarse lentamente.
— Oye, ven aquí —Vania le dijo a uno de los hombres a cargo de Sasha.
El tipo se acercó a estás dos, poniéndose frente a ellas y con su pene apuntando a la boca de Sasha.
— Vamos, Sasha, no querrás decepcionar a tu novia~ —Vania susurró de nuevo.
Vania soltó el pecho de Sasha y tomó el duro pene con su mano y lo empezó a masajear, pero.
*Sonidos de eyaculación*
Ambas chicas fueron rociadas con semen caliente.
— ¡Jajaja! ¡¿En serio te viniste con su toque?!
— ¡Ca-callense! Ella tiene una mano mágica —el hombres se negaba reconocer lo precoz que era.
Sin embargo, la mano no se detuvo, siguio masajeando el pene flácido hasta volver a ponerlo duro.
“Delicioso”
Mientras tanto, Sasha tuvo tal pensamiento al saborear el poco semen que logro caer en su boca.
Y una vez con el pene erecto nuevamente.
— Wow, mira que tenemos aquí~ Avre grande, querida~
— ¡Mmm!
Sin embargo, ahora Sasha se lanzó contra este por su propia voluntad.
— Eso, hermanita, disfruta tu primer pene~ Ahora… —Vania miró a los otros dos— Vengan por favor~
Vania tomo las manos de Sasha y las guió a los penes de los hombres.
— Mira frotalos así~
Cubriendo las pequeñas manos de Sasha, que cubrían los palos de carne erectos, con sus manos, comenzó a moverla, hasta soltarla y dejarla por su cuenta.
— Listo…
Vania volvió con su tercia, haciendo lo mismo que Sasha, pero de una forma más profesional.
Ambas chicas estaban satisfaciendo los penes en sus bocas y manos. Haciendolos venir en su cara y bañandolas en semen caliente.
Pero…
— Ah… ahora usemos los otros agujeros.
— ¡¿Eh?!
Los hombres se acomodaron rápidamente; uno abajo, otro encima y otro de pie. Con la chica en medio de los primeros dos, como si un emparedado fuera.
— Vania, esto no… —Sasha había recuperado algo de su cordura.
— Tranquila, estarás bien~ ah~
Vania fue penetrada por ambos agujeros.
— Hazle caso a tu hermana, solo mira como gime esa perra.
Dijo uno de los hombres.
*Sonido de penetración*
— ¡¡¡Aaaaaahhhhhhhhh!!!
Si vagina, que recién adquirió hace unas horas, fue desflorada, sintiendo el enorme dolor de perder la virginidad como mujer mientras la sangre brotaba de esta.
— ¡Ah! ¡Las vírgenes son lo máximo!
— ¡Concuerdo, me encanta como se siente su ano!
— ¡S-sa-saque-aaaaaaaaahhh!
— Tranquila~ahh, solo duel-mmm —Vania fue interrumpida por el pene entrando en su boca.
— ¡Mmm! — Y Sasha también.
Ambas chicas siendo penetradas por todos sus orificios, un escenario digno de una novela erótica.
Además.
— ¡Mmm! ¡Mmm~!
El dolor de Sasha lentamente se convirtió en placer.
Y entonces
*Sonidos de eyaculación*
Todos los hombres se vinieron en ellas, retirando sus penes lentamente mientras el semen se desbordaba de sus bocas, vaginas y anos.
Ambas quedaron recostadas en el piso de forma contraria la otra, ambas miradas se encontraron.
— Ah… ¿Hací… as… estas… co… cosas… por mí….? —preguntó Sasha con una respiración pesada.
— Esto y mucho más~ —Vania sonrió.
Extrañamente, la albina estaba feliz de estar con su mejor amigo de tal forma, no había culpa.
— Lo… sien… to…
— No te disculpes… apenas comienza~
— ¿Eh…?
Y horas más tarde, ambas chicas salieron de la habitación, sin ropa y bañadas en semen. Con Sasha recargada en Vania.
— Oye… Manuel… yo… no me siento bien
— Tranquila es normal cuando…
La tranquilidad de Vania desapareció cuando vió sangre escurriendo del oído de su amigo.
Acto seguido, Ren se desmayo.
— ¡Ren! ¡¿Ren?! ¡Reeeeen!
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