Project ITG - Canción 3

Cerrando el año con más de esta historia de idols (necesitaba algo para que el número de publicaciones terminara en 5. Las imágenes se pondrán después).

No se olviden votar en la encuesta, hoy es el ultimo día para votar, mañana se dan los resultados.

*Sonido de lluvia*

— ¡Maldición! —se quejaba la chica de piel bronceada.

— Ya, Aura, ¿en serio vas a estar así por lo de la chica nueva? Sabes que siempre podemos tener orgías cuando queramos — dijo la chica de largo cabello negro.

— ¡Pero es que… es la orgía de bienvenida…! ¡Siempre es la oportunidad para hacer bromas a las nuevas!

— Sí, sí. Todavía recordamos como recibiste a cada una… solo ve a la reunión, uno de los tipos quiere hacerlo contigo

— … Sí… 

— Ah, y ponte algo sexi

— ¿Qué es más sexi que mi figura desnuda?

— Buena lencería qué arrancar.

— Supongo que tienes razón… ponmela~

— ¿Es en serio?

La chica solo abrió las piernas y extendió los brazos, haciendo gestos para que la vistiera.

Y momentos después.

— Realmente tienes buenos gustos, supongo que es porque antes eras hombre.

— Cállate, solo terminemos con esto de una vez para que podamos descansar —la chica se le acercó a su oído— y tener algo de diversión entre todas nosotras…

— Sí que sabes animar a la gente, vamos entonces

Las 2 chicas empezaron a caminar por el pasillo, y aunque las dos llevaban lencería, se notaba como una de ellas ya había sido usada; con el mal acomodo de las pocas telas que llevaba, su cabello desordenado, su entrepierna chorreada y varías gotas blancas por todo su cuerpo. Mientras la otra se estaba por unir.

— ¡Chicos, Aura ya está lista para la diversión! —anunció Aura misma.

Mientras tanto, en el edificio de ITG

— Ch-chicas… y-ya no estoy segura de esto… —decía Levi temblando.

— Jaja, tranquila, Levi —dijo Jessica llevándola de la mano.

— Sí, solo confía en nosotras.

El grupo de Girly Love llevaba a su nueva integrante de la mano mientras ella estaba vendada, completamente nerviosa al perder su sentido de la vista.

Caminaron un poco más hasta que Levi pudo escuchar una puerta abriéndose.

— Bien, ha puedes quitarte la venda.

— … S… sí…

Levi se quitó la venda de sus ojos, viendo una sala de bar; con una barra de bebidas y varías estanterías, así como una gran mesa en el centro con varios platillos. Pero lo que más llamó su atención fue…

“¡Bienvenida a ITG, Levi!”

Era una pancarta con tales palabras.

— Ch-chicas… yo… g-gracias… —Levi se sentía aceptada en el grupo.

— No te emociones todavía, la diversión apenas comienza —habló Jessica con un juego de cartas en la mano.

— Primero hay que comer, no se puede jugar con el estómago vacío —dijo Miku.

— ¡Y sin alcohol! —Nico se emocionó.

Las chicas se sentaron en la mesa, listas para comer antes de hacer algo más placentero, sin embargo.

— Ch-chicas… ¿N-no es demasiada comida…?

Levi preguntó al ver la mesa repleta comida, era una cantidad grande, más de lo que 6 chicas podían comer. Había pizzas, boneless, hamburguesas, diferentes cortes de carnes, pollo empanizado, pastas, sushi, entre otros platillos.

— Bueno, el plan original era que todas estuviéramos aquí, pero Winter kiss tuvo que grabar un video promocional, y Kitty paw tenía concierto en otra ciudad, además de que no se nos permitió cambiar la fecha de reserva del bar —explicó Brenda.

— E-el bar… ¿se reserva….? —preguntó Levi.

— Sí, debido a que la empresa no quiere escándalos con el alcohol, tenemos estrictamente prohibido beber, sin embargo, dentro de este lugar podemos ponernos hasta el tope de alcohol sin dañar nuestra imagen —continuó Miku.

— Pero tampoco es que podamos usarlo todo el tiempo, necesitamos pedir un permiso para ello, y ese permiso nos lo dieron para este día —cerró Jessica.

— Y-ya veo…

Sin más que decir, las chicas empezaron a comer. Saboreando el rico sabor de los platillos mientras charlaban tanto temas femeninos como masculinos, se podía sentir el momento de tranquilidad entre las “chicas”, una escena bastante cálida.

Y entonces.

— Oye, Levi, aquí~

Jessica se ofreció a darle de comer.

— Eh, nosotras también~

De repente Levi tenía a cinco hermosas chicas queriendo darle de comer, Levi se puso roja por ello, y con toda su vergüenza fue comiendo del platillo que le ofrecía cada una. Pero Jessica, quien fue dejada al último, tuvo una idea más interesante.

— Jeje~ probemos con esto.

Jessica puso el trozo de carne entre sus senos.

Al ver eso, Levi se echó para atrás pero Jessica tomó la iniciativa.

— ¡Hmp! 

La cara de Levi fue ahogada en los pechos de Jessica, sintiendo ella los bruscos y débiles movimientos de Levi por liberarse.

— Ahh… Niña mala, solo tienes que comer la carne~

— Em, chicas, si van a jugar así… creo que me voy a retirar —dijo Brenda.

— No seas así, Brenda, siempre nos dices que no, ¿no puedes tener una aventura con nosotras aunque sea una vez? —Jessica replicó.

— Sabes lo que pienso de acostarme con mis compañeras de trabajo

— Eh, pero también somos tus amigas~

— ¿En serio? Di mi verdadero nombre —Brenda habló en un tono más serio.

Con esas palabras, el ambiente divertido se rompió, el resto de las chicas estaban incómodas con su reacción, Jessica incluso soltó a Levi.

— Bien, lo siento… Mira, terminemos de comer…

— Yo también lo siento, no quiero pelearme con ustedes, las considero más compañeras de trabajo que amigas, no me malentiendan, pero nadie de aquí sabe casi nada de las antiguas vidas de las otras, entonces como puedo considerar amiga a una persona que no he visto en sus peores momentos y no me ha visto a mí en los míos… Y bueno… las veo como mis hermanas menores, y no voy a acostarme con mis hermanas, no soy norteña.

— ¡¿Oye, cuando dijimos que eras la mayor?! —exclamó Miku.

— ¡Sí, yo soy la mayor! —dijo Nico.

— ¡No-o, soy yo! —dijo Jessica.

— ¡Decidamos esto con alcohol! —propuso Vania.

— ¿Eh? Pensé que Aura no estaba aquí —dijo Brenda al escuchar su solución.

— ¿Quieres que se acueste contigo por el título de “hermana mayor”? —le respondió Vania.

— Tienes un punto… Je, mientras las perras pelean, la reina observa —alardeo Brenda.

— ¿Nos acaba de llamar perras…? 

— ¡Agárrenla!

Jessica, Miku y Nico saltaron sobre Brenda, pero ella las esquivó fácilmente.

— ¡Creo es todo de mi parte, nos vemos mañana! ¡Bienvenida al ITG, Levi!

Brenda salió corriendo de la sala siendo perseguida por las otras tres, dejando a Vania y a Levi en la sala.

— ¡Mmm! La comida sabe más deliciosa cuando eres mujer… pero no puedes comer tanto como cuando eras hombre… —Vania dijo esto último con decepción.

— T-tienes razón…

— Y… ¿cómo la llevas adaptandote a tu nuevo cuerpo?

— Eh… b-bien… supongo…

— Oye, no seas tan tímida, digo, ya nos viste desnuda y siendo cogidas como meros juguetes, creo recordar que incluso te estabas masturbando usandonos como material.

— ¡¿L-lo viste?! —Levi se enrojeció.

— Tranquila, ya llegará tú… Oh cierto, lo hiciste con su sobrino, ¿no?

— … 

Levi no contestó.

Entonces.

*Sonido de tono de llamada*

Era el teléfono de Vania.

— Una disculpa, tengo que contestar… ¿Bueno?

Sin embargo, la tranquila cara de Vania se volvió pálida de un momento a otro.

— ¡Lo siento, me tengo que ir!

Vania tomó sus cosas y salió hecha prisa, dejando a Levi.

……

Minutos más tarde, en un hospital.

*Sonido de puerta abriéndose*

— ¡Ya estoy aquí, doc! 

Una albina entró por la puerta, con sudor en su frente y su cabello desarreglado, sin nada que ocultara su identidad.

— Señorita, puede estar tranquila, su amigo ya se ha estabilizado… Pero…

— ¿Pero?

— … No, otro doctor vendrá a atender el caso… Los dejaré a solas…

El médico se retiró de la habitación.

Vania, se tranquilizó al ver el monitor de signos vitales mostrando un ritmo regular.

— Idiota… No me des sustos así…

Vania habló como si la persona en la cama le pudiera escuchar

— Mírate… tan tranquilo… mientras soy yo el que sufre para pagar tus facturas… Pero no importa… yo elegí este camino… Más te vale tratarme como una reina, jaja… 

La chica trataba de mantenerse fuerte ante su amigo, un hombre joven pero varios años “mayor” que “ella”.

*Sonido de puerta abriéndose con fuerza*

— Hola, señorita Vania… ¿O debería decir, “señor Manuel”?

— Tú… —la expresión de Vania palideció— ¡¿Qué haces aquí?!

— Wow, se ve que morías por verte~

Con cada paso que daba el hombre en bata de laboratorio, Vania daba un paso atrás.

— Tranquila, yo también te quería ver… Escucha, Futura tiene un trato especial contigo, tú actúas y te vendes a los clientes y a cambio pagamos las facturas médicas de tu amiguito en la cama e incluso tratamos de encontrar una cura a su enfermedad… ¡Pero…! Ya han pasado dos años, ¿sí? Al cuerpo de tu amiguito le está pasando factura estar dos años en tal estado, hoy su corazón se detuvo por un minuto, pero no sabemos si estas pausas irán aumentando con el paso del tiempo, y de ser así, calculo que el hospital podrá lidiar con ello… al menos mientras no pase de los 20 minutos, incluso con la tecnología de futura podemos crear un suministro de oxígeno, pero tendríamos que recortar el bajo sueldo que te dan por tener que mantenerlo.

— Si tengo que vivir de migajas de pan para mantenerlo vivo… entonces que así sea

— Wow, tranquila, gatita blanca

— ¡N-no me digas así, ya no soy tu gata!

— ¿Ah no? 

El hombre sacó un control remoto, uno que Vania conocía bien.

— No… detente, no frente a- ¡nngh!

Vania comenzó a tener múltiples orgasmos.

— Pie… dad… ah…

— No debes morder la mano que te alimenta, mucho menos la mano de tu antiguo doctor~

— Ya no eres… mi doctor… tú ya no…

*Clic*

Un botón en el control fue presionado de nuevo.

— ¡Ahh! ¡De-detén esto! … Por… favor

La chica cayó de rodillas, temblando mientras trataba de mantenerse.

*Clic*

Los orgasmos intensos se detuvieron, dejando a Vania totalmente indefensa.

— ¿Qué… quieres…?

— Quería darte algo, pero supongo que no será de forma gratuita.

— Cómo si… siquiera algo de… ti

— ¿Incluso si se tratará de una cura para tu amigo?

— ¡Tú…!

Aunque estaba enojada, se tragó su orgullo.

— P-por favor… ayuda a mi amigo… te lo ruego…

Postrándose como si fuera un pobre plebeyo ante un rey.

— Así me gusta, pero~ tú comportamiento de antes tiene que ser castigado… Mmm… ¡Ya sé! ¡Se la chuparás a tu amigo!

— Sei… d-doctor Sei… cualquier cosa… menos eso…

*Click*

— ¡Annn! 

— ¡Silencio, gata! ¡Soy tú amo y harás lo que yo diga! Y si digo que vas a chupar el pene de tu amigo entonces lo haces, ¿o quieres dejarlo morir?

— P-por… ngh… or… a-ahh… mo…

Con lágrimas saliendo de sus ojos y su boca babeando, trataba de resistir las enormes olas de placer que sentía, era una imagen patética.

— Bien, lo entiendo, iré planeando el funeral~

El hombre se dió media vuelta y empezó a caminar lentamente.

— ¡L-lo haré~!

— ¿Mmm, dijiste algo?

— ¡D-dije que… ahh… lo haré!

La chica trató de levantarse, aferrándose desesperadamente a la cama, viendo el cuerpo inmóvil de su amigo, a punto de hacer algo que nunca deseó hacer.

Subió la bata de paciencia que llevaba, viendo el flácido miembro de su amigo.

En ese momento, múltiples pensamientos pasaron por su mente.

“No quiero hacerlo” “No quiero esto” “Por favor para” “No lo hagas”

Eran una parte.

“Quiero chuparlo” “Quiero lamerlo” Quiero su semen en mi boca” “lo quiero dentro de mí”

Era la otra.

Vania se sentía extraña ante tales pensamientos, nunca los había tenido en todas las veces que había ido a visitar a su amigo, ni siquiera pensamientos como salir con él o darle un beso habían pasado por su mente antes.

¿Era porque estaba cachonda por las nanomáquinas? Se preguntó en su mente.

Volteó a ver al hombre que la puso en tal situación, tenía una mirada que decía “házlo”.

— Lo siento… Diego… amm,

Llorando, la albina llevó el pene de la persona por la que había hecho tantas cosas. Sintiendo su sabor salado y suave debido a la medicina, así como el aroma de esté.

— Eso es, eso es. Buena gatita, mereces una recompensa.

El hombre se acercó a ella y al paciente en cama.

*Sonido de inyección*

— ¡¿Mmm?! 

De repente, el pene flácido comenzó a endurecerse.

— ¿Q-qué mmmierda hiciste…?

— Nada que lo ponga en peligro, ahora también es tu turno de ponerte una inyección.

Sei bajó los pantalones de la albina junto con su tanga, revelando lo mojada que estaba su vagina, todavía soltando jugos vaginales.

— Mira nomás qué llevas puesto, ¿acaso esperabas esto?

— Puaj, yo no- ¡Ahk!

— ¡Yo no te di permiso para hablar! Ahora sigue chupando ese pene

Vania no dijo nada, solo hizo lo que se le ordenó, llorando todavía, esperando que esto terminara pronto.

Y entonces.

— ¡Mmmm!

Vania sintió algo entrando en ella, pero no era algo entrando en su feminidad. 

Era algo entrando en su otro agujero.

— Joder, tu ano no deja de apretar, debes querer esto, gata lasciva~

— ¡Mmm~! ¡Mmm! ¡Mm~mmm!

Vania solo podía jadear con su boca llena por el pene de su amigo mientras recibía las estocadas de su antiguo mánager en su ano.

Este siguió moviéndose como pistón, disfrutando de humillar a la chica que antes estuvo bajo su revisión

— Mierda… supongo me pasé con las nanomáquinas… voy a…

*Sonidos de eyaculación*

— ¡Mmmmmmmmmmmm!

El agujero que se supone solo debe dejar salir deshechos recibió una carga caliente de semen.

— T… ¿Terminaste…?

— Todavía no

El rostro de la chica se congeló.

— Sabes, creo que es injusto que todos disfruten de tus agujeros menos la persona a la que mantienes

— No… por favor, a-amo… no eso…

— Yo no te dije que dejaras de chupar 

— Estoy, ahh~ usando mi manohh…

— Bueno, ahora vas a usar tu vagina 

— P-por favor… no… amo… ¡Agk!

Vania fue jalada del pelo.

— ¿Todavía no entiendes que eres un mero juguete? Además, lo deseas, mira lo mojada que estás.

El hombre pasó su mano por la chorreante vagina de Vania para después mostrarle sus dedos viscosos bañados en sus jugos.

— Mira, lo deseas con toda tu alma, el pene de tu amigo~ te mojas de solo pensarlo~ ¿no es así?

— Yo…

— Haz que se corra dentro de ti y todo terminará

Lágrimas en los ojos, un rostro sombrío, una vagina chorreando incesantemente… y un corazón dividido en dos.

Su lujuria lo pedía a gritos, pero su moral no lo quería así.

— Bien, si no lo quieres hacer tú… —el hombre se acercó el control remoto a la boca —inicia el proceso automática.

— ¡No! ¡Alto! ¡Sei! ¡Detén esto!

El cuerpo de Vania empezó a moverse por sí mismo, quitándose el pantalón, subiéndose lentamente a la cama, acomodándose encima de Diego.

— ¡Maldito enfermo asqueroso! ¡Te juro que me las vas a pagar! ¡Mierda! ¡No, para! ¡Nooooooooo!

*Sonidos de penetración*

El miembro erecto del hombre inconsciente fue insertado con gran facilidad en la empapada vagina de Vania.

— ¡Ahh! ¡Sei, detenlo! ¡No quiero esto! ¡¡¡Sei!!! 

Ella solo podía gritar, pues su cuerpo al estar en ese modo no hacía caso a su cerebro.

— Que gran escena, digna de tener un video… tch, lamentablemente no podemos grabarlo.

— ¡Sei, hijo de puta! ¡Pedazo de mierda! ¡Ahhh! ¡Detén esto! 

— Haz que se venga tres… no, hasta dejarlo seco, después las nanomáquinas volverán a sus funciones normales —dijo el hombre con el control cerca de su boca.

— ¡Sei! ¡Nghh! ¡Ahh! ¡Malditohh! 

Tranquila, te dejaré un regalo antes de irme.

El hombre se acercó a la chica, tocando su trasero.

— ¡Khgaaaaa! ¡¿Qué fue eso?! ¡¿Metiste algo?! ¿¡Qué mierda metiste?!

— Lo sabrás cuando termines tu trabajo.

Sei salió de la habitación después de eso, no sin antes dejar una memoria en una de las mesas.

……

Horas más tarde, en la sede de ITG.

— Ahh… chicas… se siente bien…

— Te dije que te iba a gustar~

Jessica, Nico y Miku le estaban dando una cálida bienvenida a Levi, quien se dejo llevar por los efectos del alcohol.

Entonces.

*Sonido de puerta abriéndose con fuerza*

Vania llegó

— Eh Vania, llegas en buen…

Ojos enrojecidos, cabello desordenado, incluso su ropa estaba completamente desordenada, por no mencionar los pantalones empapados.

Sin embargo, no dijo no una sola palabra, de hecho ignoró el cuarteto de chicas tendiendo sexo lésbico.

Simplemente se dirigió a la barra del bar, agarró una botella, y tomó un buen trago de esta, luego empezó a bañarse totalmente en ella, quitándose la ropa en el proceso, revelando el desastre en su entrepierna.

— Vania, ven aquí~

Jessica trató de apretar sus pechos, pero fue empujada.

La albina no dijo, solo tomó más botellas y se marchó mientras se bañaba con estás.

— ¿Qué le pasa…? —preguntó Miku 

— No lo sé, es la primera vez que se pone así… —respondió Jessica.

— ¿Deberíamos hablar con ella…? —habló Nico

— ¿Eh…? ¿Chicas…? ¿Por qué se detienen…?

Levi, estaba tan ebria que no era consciente del asunto…

— Mañana… —coincidieron las tres.

Y las chicas estaban tan cachondas que lo dejaron para mañana.

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