El negro es la nueva blanca

Historia hecha como un intercambio de servicios, también, se terminaron mis vacaciones... 

Riqueza y pobreza, dos niveles sociales cuya diferencia es tan grande como la distancia entre el cielo y la tierra.

Y de lado de la pobreza tenemos Jamal, un niño africano de tan solo 11 años, que con una edad tan corta ya estaba lleno del pecado de la envidia. Empezó cuando tan solo tenía diez años, mientras corría por las baldías calles de su aldea chocó con una hermosa mujer blanca que venía de turismo, la chica bajo la fiebre del influencer se disculpó con el chico y se tomo una foto con el para subirla sus redes sociales y mostrar su "humildad".

Y aunque tan solo fueron unos cuantos minutos, fue suficiente para que la semilla de la duda y el deseo fuera plantada dentro de Jamal. Él era tan solo otro niño de las calles, difícilmente tenía una figura a la cual imitar, por lo que al ver a esta joven, en su interior surgió un pensamiento "quiero ser como ella", Jamal quería tener esa piel blanca y suave, ese cabello sedoso y bien cuidado, ese dulce aroma, esas delicadas uñas decoradas, el dinero para vestir ropa de lujo.

Desde entonces cada mañana que despertaba solo podía quejarse de su piel oscura como el carbón, sus pies callosos, sus uñas mugrientas, sus dientes amarillos y su maldita pobreza.

Un deseo que hizo cambiar su rutina, el niño empezó a juntar la basura que podía, así como robar vestidos, maquillajes y otros accesorios femeninos, todos bastante desgastados. Comenzando a trasvestirse con lo que tenía a la mano, sin embargo, solo le daba más desesperación, verse al espejo y ver sus rasgos masculinos, los vestidos viejos, su piel negra y el maquillaje de muy mala calidad mal puesto solo lo hacía gritar y golpear la pared mientras se quejaba de no ser una mujer blanca.

Ese fue su estilo de vida desde entonces, hasta que un día encontró un pergamino entre las ropas que había robado, uno cuyo contenido mostraba un ritual para cambiar de cuerpos, lamentablemente Jamal no sabía leer, por lo que no tenía ni la menor idea de lo que este decía, pero en el momento en qje lo tocó, una voz resonó en su cabeza, una voz que le explicaba el contenido del pergamino; los materiales necesarios y los pasos a seguir.

Los materiales fueron difíciles de conseguir, era un niño de las calles que difícilmente ganaba algo de dinero pidiendo limosna o haciendo tareas menores, de hecho tardó tanto que la voz resonando en su cabeza empezó a molestarlo. Lo más difícil fue conseguir la foto de la persona con la que quería cambiar de cuerpo, en especial porque buscar fotos de celebridades en su pueblo era imposible, los adultos raramente tenían revistas, y si las tenían eran de decadas anteriores, Jamal obviamente sabía que si cambiaba con algunas de ellas sería una anciana, y el obviamente quería un cuerpo joven.

Y entonces, como si universo estuviera a haciéndole un favor, entre tanta basura encontró una revista de videojuegos que ellos conocían como "libro con monitos", no era el primero que se encontraba, ya había visto otros ejemplares con anterioridad, pero este llamó su atención, principalmente porque su portada sucia y desgastadas tenía la imagen de una cosplayer, Jamal comprobó el año de publicación, era un número de hace 2 años, así que la chica en la imagen sería una linda joven todavía. 

Y entonces espero una noche de luna llena.

Ya en le lugar, colocó las velas de tal manera que estás formaran una estrella de cinco puntas y las encendió, después hizo un corte en su mano y vertió su sangre en una cubeta que contenía sangre de cabra, una vez mezclada procedió a dibujar el pentagrama colocando en su centro la imagen de la chica y empezó a recitar palabras en una antigua lengua

— Ho siodes chuscene ims lpareisga, emcodnece anu vneua idva, al idva ed ase hciac, y laed im idva la lmaa ed see opucer

Jamal recitó las palabras que sonaban en su cabeza, y entonces todo se puso negro...

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Nota de M: Jamal está hablando en somalí mientras las personas con las que interactúa hablan inglés (que obviamente será escrito en español porque da pereza escribir dos  veces)

 — ¿D-Donde... estoy...? 

Se preguntaba el chico que acaba de despertar, pero no despertó en la habitación de una chica, no, el lugar donde despertó era  una habitación de hospital.

— ¡Doctor, la paciente despertó! —gritó una enfermera 

— ¿Qué dijo...? ¿Eh...? Mi voz...

Jamal escuchaba una voz totalmente distinta a su voz en desarrollo, entonces miró su brazos

— ¡Piel blanca! ¡Piel blanca!

Era como decía Jamal, los brazos de color oscuro que estaba acostumbrado a ver se habían tornado completamente blancos.

— Veo que ha despertado señorita Golosky

— ¿Que dijo?

Un silencio lleno la habitación, Jamal no podía entender al sujeto que lo atendía, ni el doctor pudo entender lo que su paciente decía, sin embargo, por la expresión em el rostro de la chica a la que Jamal había poseído sabía que estaba confundido

— Deje me presento, soy el doctor Mitch, quizás esté nerviosa, avisaré a su familia

El doctor se fue, Jamal se quedó observando su piel, poco le importó no entender al hombre que le había hablado, estaba embobado en su piel blanca, y que al tocarla pudo sentir lo suave que esta era, no se comparaba con la piel de su cuerpo original, una piel desgastada por un terrible estilo de vida.

— Es tan suave... 

Después de eso siguió con su cabello, era largo y sedoso, bastante lejos de su cabello quebrado y polvoriento.

— ¡Hija, me alegro que estés bien! —una mujer entró en la habitación y rápidamente abrazó a Jamal.

— Eh... Estoy bien...

Una ves más la incomodidad hizo presencia; Jamal no entendía a la mujer ni la mujer entendió las pocas palabras de Jamal

— Doctor... ¿Mi hija está bien...?

De inmediato el doctor vio a Jamal y comenzó a hacerle unas cuantas preguntas, pero viendo que las respuestas a estás eran incomprensibles el doctor llegó a una sola conclusión; el paciente había perdido la memoria y la capacidad del habla de manera indefinida.

Jamal no entendía nada, pero ver a las personas hablando tranquilamente le decía que todo iba a estar bien.

Y a pesar del raro comportamiento de Jamal que no dejaba de mirarse y tocar su piel con emoción, a las pocas horas fue dado de alta. Y al salir del hospital se llevó otra sorpresa, una ciudad con grandes edificios y anuncios por todos lados, así como calles pavimentadas y autos por doquier. Algo que nunca había visto en su tierra natal.

La mujer le pidio que subiera al auto pero Jamal no lo entiendo, así que lo hizo con señas. Y una vez más se sorprendió al ver el Interior de este y sentir como se movía, de hecho, durante todo el viaje nunca despegó su rostro de la ventana, la mujer que conducía no pudo evitar pensar que parecía un niño, aunque en realidad sí era así.

— Bueno, cariño. Ya que tienes amnesia lo mejor será que vivas con nosotros durante un tiempo, por suerte dejamos tu habitación vacía

El niño en el cuerpo de la chica solo asintió con la cabeza cuando en realidad no tenía idea de lo que dijo.

Y entonces el niño entro a la habitación que había pertenecido a su nuevo cuerpo.

— ¿Cariño, que pasa? ¿Todo bien? —preguntó la mujer al ver a Jamal llorando.

Una vez más Jamal asintió pues aunque quisiera hablar la mujer frente a él no lo entendería. Jamal estaba llorando de felicidad, por primera vez tenía una habitación para él, más de lo que había tenido siendo un niño africano.

— Bien, cariño.  Dejare que te familiarices con el lugar un rato, vendré más tarde para hablar contigo —la mujer salió por la puerta.

Jamal por fin tuvo un momento de privacidad, sin embargo, se quedó viendo la habitación de una manera reflexiva, la habitación parecía haber sido preparada con tiempo, aunque la mayoría de las cosas eran desconocidas para él, siendo capaz de reconocer una única cosa, un pequeño estante con varios perfumes, labiales, maquillajes y un espejo pegado a la pared encima de este un espejo...

— ... ¿E-Esta... soy...  yo?

Jamal se quedo impactado ante la hermosa chica que ahora era, sabía que era una chica hermosa por la foto que uso pero de todas maneras, verse en persona lo dejó todavía más impactado, no pudo evitar pasar sus finas manos por su nuevo y suave rostro.

— Es... tan suave... Y mi voz... Aaahh♪ aaaahhh♪ —Jamal tarareo un poco— Es adorable jeje

Jamal estuvo un rato más admirando su nueva imagen, haste que su mirada noto el maquillaje en el estante. Empezó a ver pieza por pieza, había unos pocos que conocía por haberlos robado o encontrado en la basura pero la mayoría era desconocido para él.

Trato de ponerse un poco de esté, lo logró, solo que no tan bien como una esperaría de una chica, si bien tenía algo de práctica de cuando estaba en su cuerpo anterior, usar maquillaje de buena calidad más las nuevas sensaciones en su piel lo hacía algo complicado.

— Ya sé, le pediré a esa mujer que me enseñe

Jamal tuvo una buena idea, pero fue una idea detenida por la barrera del idioma. Jamal, que ahora estaba en el cuerpo de una chica estadounidense, seguía hablando en somalí y no era capaz de comunicarse con las personas del lugar ni entender lo que decían.

— Entonces le pediré a esa mujer que me enseñe

Y ante una nueva solución aparecía un nuevo problema, ¿Cómo iba a transmitir tales palabras?

Una vez más miró en la habitación buscando algo que poder encontrar, entonces vio un montón de revistas apiladas, pensó que podía usarlas para explicar su pedido, pero al verlas más de cerca se distrajo otra vez, eran revistas de videojuegos, así que quedó embobado al ver los dibujos que esta contenía, "se ven geniales", no pudo evitar pensar eso.

Y después de unos minutos volvió en sí, tomó la revista y salio por la puerta, sin embargo, se sentía aún más perdido, la habitación en la que estaba conectaba a un pasillo que unía las habitaciones, no sabía a donde ir, pero...

*Toc, toc, toc, toc*

El sonido de la madera siendo golpeada se escuchaba a lo lejos, así que lo siguió pensando que podría haber alguien.

Y ahí estaba la mujer que lo había traído cortando vegetales.

— Oh, cariño, la cena todavía no esta lista

— Oye 

— Mmm, ¿Tratas de decirme algo?

Jamal empezó a señalar la revista

— Ah, ¿Quieres hacer cosplay? —la mujer dejo de cortar y empezó a hacer señas.

Jamal creyendo entender negó con la cabeza, esta vez trató de hacer señas como si estuviera leyendo y escribiendo

— Ah... ¿Quieres leer y escribir...? Cariño, no tienes que pedirme tal cosa, puedes usar tu laptop para eso

Jamal no entendió lo que dijo la mujer, y ella lo supo inmediatamente, así que la llevó a su cuarto y le mostró una laptop rosa con varias estampas de videojuegos y animes que ahora le pertenecía.

— ¿Recuerdas cómo prenderla?

Preguntó la mujer, pero al ver la reacción de Jamal supo que no era así, entonces fue a buscar un cuaderno y un lápiz, escribió todo el abecedario en el cuaderno y luego le pidió que lo practicara.

Jamal empezó a escribir en el cuaderno, y la mujer emitió el sonido de cada letra.

Y después de unas cuantas horas la sesión de estudio logro entender un poco las letras, en realidad, sería la primera vez que estudia un alfabeto, al provenir de la pobreza, cosas como leer o escribir nunca estuvieron a su alcance por lo que estaba sumamente interesado en aprender.

— Vaya, mira la hora, será mejor que te des un baño y vayas a dormir

Dijo la mujer, solo para recordar que debía hacerlo con señas.

Desde el punto de la mujer, que en realidad era la madre de la chica, su "hija" parecía una niña a la cual debía educar desde cero, así que la ayudó bañarse, Jamal simplemente disfrutó del agua caliente y las nuevas sensaciones que le invadían.

Una vez terminada la ducha, tocaba cambiarse, la mujer planeaba ayudarlo pero...

— Oh, veo que si recuerdas como cambiarte —la mujer se sorprendió al ver a su hija cambiarse por si sola.

— ¡Hmm! —Jamal asintió con la cabeza.

Y no es que se acordará, sino que ya lo había practicado, y estaba muy feliz de finalmente poder hacerlo en un cuerpo femenino, se abrochó el sujetador sin problemas, feliz de sentir como este se le pagaba sus nuevos senos, además de que gracias a estos ya no tenia que meter un relleno falso para sentir el peso de estos, y se puso las bragas sin la molesta presión que antes le causaban sus órganos masculinos. Se miró al espejo, mostrando una gran sonrisa al ver su sueño hecho realidad.

Y finalmente se fue a dormir. Había sido un fantástico primer día para Jamal en su nuevo cuerpo. Familia, hogar, una habitación propia, una cama, agua caliente, ropa y accesorios femeninos. Jamal tenia todo lo que tanto había deseado...

Han pasado tres días desde el cambio, Jamal ahora se encuentra más familiarizado con el idioma, sin embargo si inglés al hablar era bastante pobre.

Durante estos tres días, aparte de aprender el idioma, se familiarizo más con sus nuevas cosas, empezando por la ropa y el maquillaje. Disfrutaba verse al espejo en linda ropa femenina, aunque todavía no lo hacía con la tecnología, menos su celular, el cual estaba bloqueado por contraseña.

— Ma, yo lap usar querer ap-ap-apre-prender

— Sí

Ya conocía el alfabeto, ya sabía los símbolos que tenía cada letra, estaba listo para usar tecnología a la que nunca tuvo acceso, aunque primero lo pusieron a jugar solitario y buscaminas, con el fin de adaptarse al ratón, el clic izquierdo y el clic derecho. una ves teniendo algo de practica le enseñó el navegador; el gran google. así como youtube, y otras redes a las que podía acceder sin necesidad de una cuenta.

Otros tres día pasaron, Jamal hablaba un poco mejor el inglés y entendía mejor los textos, ya estaba más familiarizado con la tecnología, sobre todo su nuevo celular, había sido desbloqueado, su madre por respeto a la privacidad de su hija no checo los mensajes ni el contenido de este. lo que si hizo fue poner en sus estado que había sufrido de un accidente y por eso había estado inactiva así como estaría indispuesta por tiempo indefinido, pues ella sabía la profesión de su hija. 

Jamal descubrió más sobre su nueva vida, al parecer el nombre de la chica, en al que ahora habitaba su alma, era Katia, aunque todavía no entendía del todo su trabajo. "Cosplayer" era una palabra que nunca había escuchado, aunque se emocionó cuando su madre le explicó que era algo de usa trajes...

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— Bien hija, me voy, te vendré a visitar en unos días

— Sí mamá

La mujer salió por la puerta, dejando a Jamal solo en su nueva casa. Ya sabía cocinar por lo que pensó que estaría bien sola, y quizás así pueda recuperar sus recuerdos.

Jamal se quedo asombrado ante lo que veía, era una casa grande, en la sala principal había una enorme pantalla plasma de 70 pulgadas, sillones y posters de videojuegos, siguió explorando, encontrando una cocina amplia y un gran comedor. subiendo las escaleras encontró un enorme baño, así como un cuarto dedicado exclusivamente a la ropa, y por ultimo pero no menos importante, su habitación, la cual estaba llena con cosas frikis, un set gamer profesional, estantes con dvds y blue rays de animes, series y películas, figuras coleccionables, posters y varías consolas de videojuegos tanto de generaciones actuales como generaciones antiguas.

Como lo que más le importaba la atención era el maquillaje y la vestimenta fue a la otra habitación, y después de haber dado una vuelta de 360° empezó a saltar de la emoción.

Sin embargo no estaba familiarizado con el como debían ponerse y como todavía tenia que familiarizarse con la casa tomo un conjunto de ropa interior y unas medias y se las puso.

Entonces Jamal se detuvo, estaba a punto de vestir con algo más pues ya lo había regañado su madre por andar semi desnudo en la casa, pero ahora estaba en "su" casa, no había quien le dijera que hacer, además, disfrutaba como el aire recorría su piel.

Una vez más volvió a la que de ahora en adelante sería su habitación, quería resolver otra curiosidad, los videojuegos, pudo jugar unos cuantos en la laptop de su madre y otros cuantos en su celular, además aprendió de ellos por los anuncios que le salían cuando navegaba en internet. Obviamente no sabía usarlos, pero no era nada que un tutorial de youtube pudiera resolver.

— Guuuaaoo...

Jamal quedo impresionado ante los gráficos del juego, había puesto CoD: Warzone, sin embargo, era realmente malo jugando, pero no se detuvo, jugar tal cosa era otra de las miles cosas que nunca hubiera podido experimentar en su cuerpo anterior, por lo que siguió a pesar de las derrotas, y no pudo evitar gritar de emoción cuando logro matar a otro jugador.

Entonces paró hasta que le dio hambre, fácilmente se hizo un emparedado y lo comió con alegría antes de irse a dormir...

Despertó con una gran sonrisa, de hecho lo hacía cada mañana al despertar y ver que el cambio no había sido un sueño. Inmediatamente después desayunó. Paso el día alternando entre jugar, vestirse, practicare el idioma y leer los mangas que la verdadera dueña de ese cuerpo tenía en su habitación.

Pero esto último marcaría un punto crucial en su nueva vida....

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— ¡Una chica desnuda!

Dos días después, Jamal había encontrado un eromanga entre las posesiones de Katia, el cual tenia un inicio con la protagonista masturbándose.

— Espera, ahora yo soy una... pero...

Jamal siguió mirando el manga, viendo como la mujer se tocaba, también quería hacerlo, pero era un inexperto. llevaba poco más de una semana en ese cuerpo pero solo hasta ahora sintió curiosidad por el cuerpo femenino.

— Bueno... Solo hagamos los que en el manga...

Jamal se quitó la ropa y empezó por tocar sus tetas, no era la primera vez que las tocaba, pero si la primera vez que lo hacía con morbo.

— Mmm se sienten bien...

Jamal siguió jugando con ellas un rato más, disfrutando del suave tacto que sentía, jadeando ligeramente al frotarlas.

Entonces continuó imitando a la chica del manga y dirigió una de sus manos a la vagina que hasta ahora solo había usado pera orinar.

— ... ¿Ya ahora que se supone que haga?

Jamal ya tenía la mano en su vagina pero no sabía que hacer, al no tener conocimiento en el erotismo y en los mangas no fue capaz de interpretar correctamente el dibujo de éstos últimos. Así que tomó su celular y como todo niño inexperto busco "mujeres desnudas" en el navegador, entró en el primer link que encontró pero al ser solo imagenes agregó "videos" a la barra de búsqueda. Rápidamente encontró varios vídeos. Aprendió que lo que estaba haciendo era conocido como "masturbación", así que también lo agregó a la barra de búsqueda, encontrando así lo que buscaba, y entendiendo mejor lo que debía hacer.

Una vez más acerco su mano a la entrepierna femenina, y siguiendo los ejemplos de los vídeos vistos empezó a frotarla, sintiéndose bastante bien, incluso jadeó un poco.

— ¡Mmm! No está mal...

Y entonces metió uno de sus dedos.

— ¡Ahh! ... Esa... ¿Fui yo...?

Jamal se sorprendió por la nueva sensación de placer y su voz al gemir por este, y curioso por este nuevo placer, siguió jugando con su dedo.

— Ohh, de saber que esto era así... Lo hubiera hecho desde el primer día... ¡Mmm!

El intenso placer que sentía Jamal era como una corriente eléctrica que recorría todo su cuerpo, brotando desde su entrepierna, desbordando lentamente sus jugos.

— ¡Mmm! Se siente muy bien cuando la froto... 

*Chorreo, chorreo*

Jamal siguió masturbándose, aumentando el número de dedos en 1 y aumentando la intensidad de estos, y entonces...

— ¡Aaaahhh! 

Jamal experimento el orgasmo femenino pero primera vez, y con ello llegó un leve dolor a su cabeza, al no ser nada grave simplemente lo ignoró.

Desde ese día empezó su pequeña obsesión con el placer femenino. Sin embargo, fue hasta el tercer orgasmo que tuvo que entiendo que estos jugarían un papel importante en su nueva vida, cada orgasmo que sentía le deba acceso a las memorias del cuerpo que ahora habitaba, el primero le dio acceso al idioma, pero no lo notó, el segundo fue el acceso a las habilidades de maquillaje de la chica, que tampoco notó ya que al salirle tan bien este pensó que fue gracias a su esfuerzo. Pero el tercer orgasmo le dio lo que más necesitaba, las memorias de Katia. 

Con las memorias en su poder pudo reconocer mejor las cosas, y entiendo el poder de los orgasmos paso todo un día en la cama...

— Jeje... Jejeje... ¡Jajaja! ¡Por fin lo he logrado! Ahora soy Katia Golosky. Lo tengo todo; sus conocimientos, sus habilidades con el maquillaje, sus vestidos, su casa, ¡Y su cuerpo! ¡Mi cuerpo! —Jamal habló con un inglés bastante fluido— Bien, supongo que es hora de enviarle un mensaje a "mi" mamá, y de paso renaudar "mis actividades"

Jamal, no, la nueva Katia le mandó un mensaje a su madre diciéndole que ya había recuperado la memoria, y al mismo tiempo se preparaba para anunciar su regreso.

— Sí, me veo fantástica

Lo primero que hizo fue usar sus nuevas habilidades para vestir el cosplay que usaría en el stream de su regreso. Después encendió la PC y abrió su canal de stream para iniciar el directo.

— Hola mis amores, Lady Melamori está de regreso, perdonen mi inactividad, sufrí de un grave problema de amnesia, pero ya estoy bien y estoy lista para volver —Katia sonrió a la cámara mientras hacia una seña de paz con su mano.

Después de eso fue a jugar una vez más con su guardarropas, pues ahora con el conocimiento en sus manos era sencillo vestir los trajes y accesorios.

— Nada mal

La nueva Katia disfrutaba de su rutina. Jugar videojuegos, hacer stream, ver animes y leer mangas, trabajar en sus cosplay, usarlos, tomarse fotos candentes con estos y subirlos a su patreon, pero sobre todo masturbarse, era totalmente feliz.

— Y con esta foto terminamos, muy buen trabajo

— Ay gracias dire, deje tomo una selfi para mis fans 

La chica tomó su celular y tomo la foto cun una gran sonrisa en su rostro.

"Bien, no olvides ir a mi despacho" El director le había mandado un mensaje.

Una cosa que no sabía nadie es que Katia y el director tenían una relación, bueno, en realidad empezó como un intercambio de servicios, ella ofrecía su cuerpo y él le daba un estudio para sus fotos así cono proveerá con mano de obra para sus cosplay. La antigua Katia no dejó que su relación llegará más allá de amigos con derechos pero la nueva prefirió tener algo más con él...

— ¡Ahh! ¡Sí, Hall, dame duro!

— Oh, tu vagina está muy apretada últimamente...

Katia se encontraba en la oficina del director teniendo sexo con este, el sexo como mujer fue otra de las cosas a las que la nueva Kati se hizo adicta. Y justo ahora estaba contra el escritorio recibiendo las duras estocadas de Hall.

— ¡Ahh! ¡Me voy venir! 

— Yo también, vengamonos juntos

— ¡Sí! ¡Aaaahhhh!

Hall se había venido dentro de la vagina de Katia. Era la sensación que más amaba, sentir su útero siendo llenado de esperma caliente...

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Ya había pasado un mes desde el cambio. Ya no había ni una pizca de Jamal en el cuerpo de Katia, ni siquiera la personalidad infantil que tenía en un inicio, de hecho, su modo de actuar fue transformándose poco a poco, siendo un modo bastante femenino.

— Y terminamos. Por cierto, ya arregle tu permiso de viaje, en serio, ¿Por que quieres ir a áfrica?

— Eh pues quiero volar y ver a esa gentecita para aprender de su cultura, y ya sabes, mostrar mi humildad al internet y a mis ternuritas

Hall no cuestiono los caprichos de su princesa, simplemente los realizó, Había conseguido un vuelo a áfrica así como un guía e interprete que ayudarían a Katia durante su visita.

Ya en casa Katia preparó sus cosas, pero antes...

Se puso otro traje y preparo contenido para sus fan mientras avisa que estaría inactiva por dos semanas.

— Hola mis criaturas, su reina los ha invocado, solo quería decirles que estaré inactivas por unas semanas, pero no se pongan tristes, volveré con nuevo material jiji

Katia leyó el chat, regocijándose al ver a sus seguidores deseándole un buen viaje y que esperarían su regreso.

Y 1 día después...

— Saludos, señorita Golosky, soy Amari, seré su guía durante su estancia —saludo el hombre que se encargaría de llevarla a recorrer el lugar

— ... Hola, mucho gusto, ah, puede sentirse libre de hablar en su lengua natal

El guía se quedo atónito, la hermosa chica blanca le había hablado en un perfecto somalí. 

Y después de unos segundos volvió a su papel, guiando a la chica por el lugar mientras llegaban al hotel. 

Uno pensaría que al haber nacido en África y haber vivido ahí por 11 años haría que fuera un lugar sin emoción, pero Jamal, que había vivido toda su vida en una aldea en extrema pobreza, ver la ciudad fue igual de sorprendente que cuando vio las calles de Estados Unidos por primera vez.

Ya en la habitación cargo su celular y se empezó a masturbar imaginando como Hall le hacía el sin respeto. 

Sin embargo sus dedos no eran suficientes para controlar el calor en su entrepierna, Hall estaba lejos, y la fidelidad no era algo que estaba en su diccionario, así qué llamó al guía a su habitación... 

— Oye, Arami... ¿No quieres divertirte un rato? —Katia lo recibió en lencería.

Arami salto sobre ella sin la menor duda.

Arami la beso mientras usaba su manos para jugar con sus tetas, Katia solo jadeaba de placer, pero entonces se llevó una sorpresa al bajar de su pantalón.

— Es... enorme... 

Katia se quedó aturdida por unos momentos antes de empezar a lamerlo hasta ponerlo duro. "Esta cosa va a estar dentro de mí" pensó Katia poco antes de introducirlo en su boca, moviendo hacía atrás y hacia adelante...

— Ahh ¿Podemos pasar a plato principal? Mi mandíbula se está cansando...

— Seguro, recuestate en la cama

Katia se acomodó abriendo las piernas y usando su mano para revelar el interior de su vagina invitando a Arami.

*Sonidos de penetración*

— ¡Ahh! ... In... creíble... 

El enorme y duro pene de Amari había entrado en la vagina de Katia, dándole más placer del que había sentido con Hall.

Rápidamente los gemidos invadieron la habitación, así como el sonido de las arremetidas de Amari.

Katia podía sentir como la gran vara de carne expandía sus paredes vaginales con cada estocada.

Y finalmente se vino dentro de ella.

Ambos continuaron un rato más antes de despedirse.

Y durante la mayor parte de la semana, Katia estuvo de turista, disfrutando las comidas y comprando baratijas, y haciéndolo con Arami.

Pero el último día fue distinto, alquiló un vehículo y le pidió a Arami que la llevará a una aldea específica. Arami la llevó algo extrañado de su petición.

La dejo en la entrada de esta, fue una petición de Katia, también le pidió que la esperara en el auto.

La chica bajó y empezó a caminar, viendo el lugar donde había crecido, feliz de saber que había escapado de tal lugar, entonces

— Tú! ¡Mi cuerpo, devuelveme mi cuerpo!

Una voz gritando en inglés sonó, la voz de un niño africano. Katia hizo una mueca, pues era el niño que alguna vez fue, era su antiguo cuerpo, ahora habitado por el alma de Katia.

— ¡Niño loco, no molestes a la chica! —gritó un hombre regañando a la antigua Katia.

— Está bien, deje que hable con él...

El ex niño tomó a la ex chica de la mano y lo llevo a su escondite mientras él todavía gritaba que le devolviera su cuerpo.

— Hola, Kata... No, Jamal, ahora ese es tú nombre

— ¡No soy Jamal, y tú no eres yo! ¡Devuélveme mi vida!

— ¿De qué hablas Jamal? Claro que está es mi vida, soy Katia Golosky, una sexi cosplayer que disfruta se su comoda vida en América

— ¡Basta! ¡Ya regresanos! ¡Si nos regresas te adoptaré y te llevaré a mi hogar!

— ¿Ehh~? ¿Y por qué querría que me llevarás a mi hogar? Escucha, no vine aquí a cambiar, solo vine a agradecerte por darme tu vida, amos estás tetas y esta vagina, no pienso devolverlas.

— ¡No, la gente se dara cuenta de que no eres yo! 

— ¿Ah?

Ante esto, Jamal en el cuerpo de Katia comenzó a contar la vida de la chica, contando hasta cosas que solo ella sabía.

— ¿Cómo es que...?

— Lo vez, soy tú, soy Katia, y por lo que veo tú sigue sin acceder a mí recuerdos. No importa no es eso a lo que vine

La chica sacó de su bolsa varias cajas y se las dio al niño africano.

— Es un celular y una pila portátil, tiene un plan integrado, el como consigas señal es tu problema... Oh cierto, eres un preadolescente, y como tienes necesidades, te preparé un par de regalos, abre la galería

La chica en el cuerpo de niño lo hizo, solo para horrorizarse

— ¡Por qué tú...! Espera... Esto es... No... ¡¡Noooooooo!!

La chica se enojo al ver el monton de fotos desnudas de su cuerpo, pero sobre todo se horrorizó al ver un vídeo de ella teniendo sexo con el director del estudio.

Enojada trató de sujetar al niño en su cuerpo pero...

— ¡Quita tus negras manos de encima! 

El niño en el cuerpo de la chica golpeo su antiguo cuerpo, y este al ser bastante débil quedó paralizado.

— En fin, solo quería agradecerte, "Jamal". Gracias por la vida que me has dado

Fue lo último que dijo Katia antes de retirarse. El niño solo podía llorar al ver su verdadero cuerpo irse mientras se quejaba del dolor.

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Y días después de su regreso a América, Katia celebró su meta de 5 millones de suscriptores.

— Hola ternuritas. Hace unos días el canal alcanzó los 5 millonsitos, y pus quería celebrarlo con este magnífico cosplay para mis amores, ¡Gracias pro todo su apoyo, los amo!

Katia no podía ser más feliz, lo tenía todo.

En cuánto a la verdadera Katia, ella sufrió el infierno desde el comienzo, al despertarse después del cambio busco ayuda de la gente a su alrededor pero no los entendía, no solo eso, en el momento en el que Jamal hizo el ritual, traía un vestido puesto, y al salir Katia llevando ese vestido hizo que el niño fuera tachado de loco y travesti, las personas se burlaban de ella pero al no entender el idioma no se dio cuenta.

Tuvo que soportar el hambre y el duro piso de tierra, así como comer cualquier asquerosidad que encontrará para sobrevivir unos días más.

Y aunque se recuperó poco después de ver s su cuerpo largarse, pensó que podría recuperar su cuerpo si se ponía en contacto con su familia, lamentablemente el celular que le habían dado estaba modificado para solamente tener un contacto, su antiguo número. 

Pensó que si lo llevaba a un centro de servicio podría quitar las restricciones, pero al estar el pueblo retirado de una ciudad no podía hacer nada, mucho menos siendo un niño, realmente no podía hacer mucho con su cuerpo actual. Esa era la vida que ahora tenía que vivir, su vida como "Jamal", pasando de una vida de lujos y riqueza a una vida de miseria y pobreza.