Sin retorno: capítulo 1

Este es el inicio de una historia en colaboración con Jessica, historia que también podrán leerla en su blog, lo cual deberán y recomiendo hacer pues es narrada desde el punto de vista de cada quien, es decir, en su versión verán cosas que no tiene la mía y viceversa, el orden en el que lo hagan realmente no importan ya que la historia sigue el mismo curso, solo cambia quien la cuenta, esperamos que disfruten de esta colaboración y agradeceríamos que comentaran su opinión.

“Sin retorno” Era el nombre de un crucero cuyo lema de la empresa encargada de administrar los viajes en éste era “Te la pasaras tan bien que no querrás regresar”...

Mi nombre es Manuel, uno de los tantos camareros con los que cuenta el crucero “Sin retorno”, aunque mi área se dedica más a atender a los ricos, si bien la paga y las propinas son buenas… el trabajo en sí no lo es tanto, he tenido que limpiar su desastre y soportar humillaciones, justo ahora estoy en mi descanso, viendo desde uno de los balcones en la cubierta como el resto se divierte, viendo como los niños adinerados de papi se gastan su dinero en bebidas… solo puedo maldecirlos en silencio mientras finjo una sonrisa.

El viaje continuaba su curso, pero algo extraño pasó, el cielo estrellado fue reemplazado por grandes nubes, entonces…

*Sonido de rayo*

Un relámpago golpeó el barco, haciendo que cundiera el pánico al mismo tiempo que la lluvia comenzaba a caer…

*Sonido de explosión* 

La parte inferior de la popa del barco había explotado, la gente comenzó a correr hacia la cubierta en proa…

Un estruendo tras otro me habían sacudido junto con el barco, casi pierdo el equilibrio, lo siguiente que escuche fue el altoparlante del restaurante…

“Que… ide… desa… peligro…” decía el altoparlante con mucha estatica.

Después de eso, vi a todas esas personas con dinero que tanto despreciaba salir corriendo a toda prisa, empujándose unos a otros como animales, yo me quede en el balcón riéndome un poco, desde que vi el titanic y la sirenita sabía que si esto me llegaba a pasar no tendría salvación alguna, no era una mujer ni un niño para que me dieran prioridad en los botes salvavidas… 

Jajaja, esperaba tener un mejor final -dije-

Entonces, en lo que me asomaba a ver que sucedía en la cubierta, vi algo que llamó mi atención, se trataba de tres personas, dos lindas chicas y un chico un poco detrás de ellas corriendo en sentido contrario…

Pensé que tal vez, solo tal vez, tenían algo en mente para salir del barco, así que decidí seguirlos… el problema era que estaba en un balcón, uno de los más altos, por suerte los balcones iban descendiendo en forma de escalera, así que fue bajando de uno en uno lo más rápido que pude, no podía permitir que me dejaran atrás.

En medio del caos, si alguien prestara atención, podría notar cuatro personas destacando por ir en sentido opuesto, eran dos hermosas jóvenes, aunque parecían tener una relación amo-sirviente, el otro era un chico con ropa casual, a simple vista parecía un pasajero más, y un poco más atrás de ellos; yo, un camarero, siendo yo y el otro chico guiados por las chicas delante de nosotros…

Después de correr por unos cuantos minutos las dos chicas se detuvieron en seco.

¿P-Por qué nos detenemos, Jazmín? -preguntó la joven-

Tenemos que esperar a que esté despejado, si ven lo que haremos se lanzaran contra nosotras -respondió Jazmín-

La chica entendió rápidamente a lo que se refería su sirvienta, aunque era peligroso esperar, lo era aún más apresurarse, poco a poco la gente se fue alejando, entonces…

¡Señoritas, necesito que se retiren del lugar! ¡Por favor vayan a dónde los botes salvavidas! -gritó un guaria-

El guardia gritaba debido al ruido de las demás personas, pero era inútil, la chicas solo hacían una expresión con su rostro que indicaba que no estaban dispuestas a irse, pero el guardia no podía aceptar un no por respuesta, su trabajo era asegurar de que todas las personas fueran hacer los botes, incluso si tenía que ser por la fuerza.

Pero entonces el chico delante de alguna manera hizo que el guardia se retirara

"¡Creo que tienen un plan… me gustaría formar parte de el!" fue lo que alcance del chico, lo sabía, tenían un plan.

¡Pienso lo mismo! -gritó después de alcanzar a escuchar el diálogo del chico que iba por delante de mí-

La sirvienta se nos quedo viendo con una mirada que decía "parece que no hay de otra", por lo que comenzó a contar su plan, además de que necesitaría manos extra para lo que estaba por venir, después de eso esperamos a estar completamente solos…

Sin más compañía, la sirvienta reveló una pequeño bote con motor integrado, el otro chico y yo nos encargamos de bajar el bote por medio de un sistema de poleas, y tan pronto tocamos el mar partimos sin rumbo esperando salir de la tormenta, y para matar el tiempo comenzamos por presentarnos, desafortunadamente ese pequeño momento de tranquilidad no duró nada, fuimos barridos por una enorme ola durante nuestro escape…

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Fui despertado por olas golpeando mi cara.

¡Ah! ¡¿Morí?! ¡¿Ah?! ¡Mi voz! Espera… ¡Mis manos! Son más delgadas ¡¿Tetas?! ¡¿Por qué tengo tetas?! Entonces… ¡No está! ¡¿Soy una mujer?! -me preguntaba mi mismo mientras exploraba mi cuerpo-

Tenía tetas, mi pene se había ido, largo cabello blanco, finas extremidades, mis ropas me quedaban flojas, no tenía un espejo a la mano pero la sensación transmitida al pasar mis dedos por mi piel me decía que todo era real, yo realmente me había convertido en una mujer. Observé a mi alrededor, por un lado estaba el mar, al otro una zona boscosa, no sabía en que parte del mundo estábamos pero estar en tierra era mejor que nada, entonces vi a una de las chicas con las que escapé, era la morena pero había algo raro en ella, sus ropas eran totalmente distintas a las que traía en el momento del escape, más bien, parecía traer puestas las ropa de el otro chico, Jeison creo que se llamaba, trate de despertarla…

Después de sacudirlo un poco despertó, pero lo que hizo fue totalmente inesperado, dirigió su mano a mi entrepuente y la apretó levemente "Ah" fue el sonido que hice con mi nueva voz, un gemido… ¿Adorable? no lo sé, por suerte me eche para atrás antes de que Jazmín hiciera algo más ¿Quién diría que la sirvienta sería lesbiana? Pero pasó algo raro, comenzó a quejarse de que le faltaba su pene y que ahora era una mujer… ¿podría ser que…?

¿J-Jeison? -pregunté-

¿Cómo sabes mi nombre? -preguntó la morena confusa-

Soy yo, Manuel, el camarero, por alguna razón cuando desperté mi cuerpo era el de una chica -respondí-

Genial, mientras tu cambiaste con una belleza yo cambie con la sirvienta… aunque tampoco está tan mal… jeje, las tengo más grandes que tú, por cierto, hiciste un lindo gemido momentos atrás -dijo Jeison en tono burlón presumiendo sus enormes pechos-

¡Eso no es lo que importa! ¡Debemos encontrar la manera de volver! -grité sonrojado-

Momentos atrás éramos un par de chicos, ahora ambos somos chicas, continuamos conversando, dándonos cuenta de que faltaban las chicas con las que habíamos escapado, gritamos sus nombres pero finalmente Jeison noto huellas en la arena, las cuáles llevaban al bosque, decidimos seguirlas, adentrándonos en el.

Caminamos por varios minutos hasta que escuchamos el sonido de una cascada.

Al escuchar el sonido de la cascada pensé “agua dulce”, agua que podríamos beber para evitar la deshidratación, no sabía cuántas horas habían pasado desde aquella ola, pero sí sabía que mi boca estaba seca, supongo que Jeison estaba igual, decidí acelerar un poco el paso.

Después de unos minutos, llegamos a la cascada, solo para encontrarnos con la figura de un chico de cabello rubio que gozaba de un refrescante baño al aire libre.

Por alguna extraña razón, ni yo ni la morena podían dejar de mirar el paquete que colgaba entre sus piernas, entonces el hombre se dio cuenta, pero en lugar de actuar como un galán confiado e invitarnos a unirse cubrió su pecho y su entrepierna mientras gritaba “¡Pervertidos!”, acto seguido ambos fuimos tomados del brazo, tirados al suelo e inmovilizados.

Oh, tú debes ser Jeison, pero tú… esa ropa, ¿Eres el camarero? -preguntó la voz masculina-

¡Sí, soy Manuel, el camarero! -respondí-

Aunque me dolía el brazo… la sensación en mi pecho era otra… el que las tetas en mi pecho estuvieran siendo aplastadas contra el piso… se sentía extrañamente bien… sumada a la sensación que me producía ver el pene de aquel chico… no sé por qué no podía dejar de verlo… creo que me estaba excitando, podía sentir un cosquilleo en mi entrepierna… Lo malo de ser masoquista es que este tipo de tratos me prenden…

Suéltalos Jazmín -ordenó el hombre después de cubrir su entrepierna y pecho con trozos de tela-

El chico nos explicó todo, él, o ella, era Sasha, hija bastarda de un importante empresario, nacida de una noche de aventuras con una prostituta y reconocida por su padre después de los 15 años, a pesar de ser reconocida por él, la opinión del resto de sus familiares era distinta, nunca la aceptaron ni mostraron amor, principalmente por el color de su cabello, el cual pertenecía a su madre, razón para odiarla aún más, se negaban rotundamente a compartir sangre con la hija de una mísera dama de la noche, por lo que sufrió constantes intentos de asesinato, todos fallidos, este viaje era en realidad un escape, estaba dispuesta a dejar lo poco que tenía atrás y rehacer su vida en el otro lado del mundo, pero sucedió el incidente del naufragio y ahora estaba allí, despertando ahora como un hombre, con su sirvienta habiendo cambiado cuerpo con un desconocido, y actualizando a Jeison y a mí, quienes fuimos convertidos en chicas.

No pude evitar pensar “que chica tan desafortunada”...

Jazmín poseía basto conocimiento en los temas de supervivencia, más bien en casi todo, fue la sirvienta asignada por el mismísimo padre biológico de Sasha en persona, la única persona que le fue leal en todo momento. 

Oye, Sasha -dije-

Dirígete a ella como la señorita Sasha -ordenó la sirvienta en el cuerpo de Jazmín con una mirada intimidadora-

… Señorita Sasha, ¿No debería estar preocupada por ser un hombre? -pregunté manteniendo la compostura como el camarero que era-

¿Y por qué lo estaría? me he librado de varias desventajas de ser una mujer, y no solo eso, ahora soy la viva imagen de mi padre en su juventud, podría volver y reclamar la parte que me pertenece sin problema alguno, ahora soy rubia, esos malnacidos deberán aceptarme pero… -se detuvo Sasha viéndome fijamente-

Tus ropas, dámelas -ordenó Sasha apuntándome-

¿Eh? No voy a dártelas, además son ropas para hombre -dije negándome-

Jaja, es cierto, son ropas para hombre, y justo ahora, entre tú y yo, quien tiene las tetas eres tú, y quien tiene el pene soy yo, ¡Jazmín! -gritó Sasha-

Jazmín soltó a Jeison y comenzó a despojarme de mis ropas dejándome completamente desnudo, quise recuperarlas pero fui tumbado por Jazmín

Esa ropa ahora le pertenece a la señorita Sasha, le sugiero que deje de intentar recuperarla, recibir una herida fatal estando en esta isla sin médicos o medicamentos puede ser fatal -dijo Jazmín amenazante-

Era inútil, mi nuevo cuerpo era débil, y la sirvienta ahora tenía el cuerpo de Jeison por lo que mi lucha carecía de más sentido todavía.

¿Entonces qué voy a usar? -pregunté enojado-

Esto… -Jazmín sacó un conjunto color rosa-

Era vergonzoso, tenia que usar ropa interior femenina, lo peor de todo es que era color rosa, nunca en mi vida he utilizado ropa de tal color, incluso recuerdo haber fingido estar enfermo durante un evento en el que teníamos que llevar ropa color rosa, lo que estuve evitando durante muchos años finalmente sucedió...

Solo me quedaba mirarla con con rabia. Entonces Jeison se empezó a reír de mí, estaba apunto de gritarle que se callara cuando el karma lo golpeo, Jazmín le quitó sus ropas y lo dejó también en ropa interior.

Como si no tuviéramos suficientes problemas, uno nuevo surge, especialmente para mí... y parece que también a Jeison... Me refiero a la necesidad de liberar el líquido conocido como orina, preferí aguantar las ganas pero ver a Jeison orinar después de ser regañado por hacerlo incorrectamente hizo efecto cadena en mí, traté de aguantar ya que no quería ser visto ni sermoneado pero el sonido del agua y de su orina estaban influyendo en mí… al final termine por hacer lo mismo, obviamente aprendí de los errores de Jeison, no quería ser regañado por estas perras, ya suficiente tenía con ser privado de mi ropa y dejado en estas prendas.

Baje mis bragas, me puse en cuclillas y trate de orinar, pero era extraño, nada salía... y al igual que Jeison, fui regañado, al parecer tenía que relajar mis músculos, pero no podía con ellas viéndome, así que cerré los ojos esperando que funcionara…

¡Dios! Estaba en la gloria, liberar esos líquidos se sentía muy bien…

Después de eso nos organizamos para recolectar recursos de la naturaleza, Jazmín se fue con Jeison para recolectar comida, mientras que Sasha y yo buscaríamos madera o cosas que se puedan usar para armar una pequeña tienda para pasar la noche...

Porque ahora mi cuerpo es débil es que termine siendo arrastrado. Caminamos por el bosque durante varios minutos, recogimos varias ramas secas con el fin de usarlas para hacer una hoguera, entonces algo llamó nuestra atención, en medio del paisaje arbolado se veía a lo lejos un edificio, Sasha y yo fuimos a explorar, no estábamos lejos de nuestros compañeros todavía, perdernos no era una preocupación, se trataba de una iglesia, no sabíamos cuánto tiempo llevaba ahí pero podríamos decir que mucho, es lo pensaba yo al ver el deplorable estado en el que se encontraba. entonces vi que algo brilloso en uno de los pisos altos del edificio...

Oye, ayúdame a subir a ese muro, creo que vi algo -dije viendo a Sasha mientras apuntaba a uno los muros de la iglesia-

¿Y por qué debería subirte? ¿Cómo sé que no vas a escapar? -preguntó Sasha con desconfianza-

… No gano nada con escapar… y ahora el fuerte eres tú, así que ayúdame -respondí tratando de mantener la calma-

Sasha se inclino para poder subirme en ella, yo me sube a su espalda y rápidamente ella se impulsó hacia arriba, entonces algo que me había estado molestando desde que desperté, el movimiento de mis pechos, el impulso hizo que estos se balancearon alterando mi equilibrio y haciéndome caer encima de Sasha…

*Golpe*

No sé como pero la posición en la que caímos no era nada buena.

¡Kya! -gemi-

Mi trasero cayó sobre su cabeza, trato de hablar para que me quitará de encima pero en su lugar terminó por rozar mis recién adquiridas partes femenina, después de liberar tal sonido traté de levantarme pero Sasha me sujetó de las piernas.

¿Q-Qué estás…? ¡Ahh! -traté de preguntar pero fui interrumpido por la sensación placentera en mi entrepierna-

Sasha estaba lamiendo mi… vagina… y se sentía tan bien que no podía evitar soltar unos lindos y adorables gemidos, entonces de alguna manera vi su entrepierna, vi el bulto que se formaba en el pantalón que fue mío momentos atrás… quería tocarlo…

¿Ah? -pregunté confuso-

El placer que me estaba dando Sasha se había detenido, de repente sentí como era movido de mi lugar, Sasha se había levantado.

Bien, ese es tu castigo por caerte, oh mira tu cara jaja parece que lo estabas disfrutando -dijo Sasha burlándose- 

¡Cá-Cállate!¡Más importante, debemos decirles a los otros dos! -grité sonrojado de la vergüenza-

Regresamos al punto de encuentro para reunirnos con Jeison y Jazmín esperando que hayan tenido tan buena suerte como nosotros.

Después de regresar, cada grupo contó su anécdota ocultando la parte sexual, Jeison y Jazmín reunieron varios frutos, mientras que Shasha y yo encontramos la iglesia y recogimos ramas secas, los cuatro nos movimos a la iglesia, una vez ahí Jazmín y Sasha se encargaron de poner las pocas butacas que todavía servían en las entrada de la iglesia para servir de barrera improvisada, después juntó un montón de tierra y colocó encima las ramas secas, usando la más resistente para hacer fuego por fricción, no le fue un problema, posiblemente por su nueva fuerza, finalmente la noche se apoderó de la isla, los cuatro disfrutamos del hermoso cielo estrellado, el cuál nos daba a entender que realmente estábamos lejos de la civilización, un cielo con tantas estrellas no era posible de ver en la ciudad, después de eso nos fuimos a dormir…

Momentos más tarde.

La molestia causada de dormir en el piso me despertó, pero fue raro, Jeison y Jazmín no estaban, pensé que estarían afuera platicando así que quise acompañarlos, vi que Sasha todavía estaba dormida así que me levante haciendo el menor ruido posible, bien podía estar enojado con ella por haberme quitado mis ropas, pero entre las cosas que respeto estaba el sueño, nunca me atrevería a interrumpir el sueño de alguien más a no ser que fuera necesario.

Seguí caminando sin hacer ruido hasta que escuche unas voces… si es que se le podían llamar así. Después de prestar un poco más de atención me di cuenta de que no eran voces conversando, no, eran algo que reconocería en cualquier momento, gemidos…

Con mayor cautela me acerqué a la fuente de estos gemidos pero entonces…

Vi a Jeison y a Jazmín haciéndolo… Jeison parecía estar disfrutándolo, no contenía sus gritos para nada… incluso rogaba por más… y por alguna razón, verlos teniendo sexo me estaba excitando… Lentamente comencé a dirigir mis manos hacia mis tetas, podía sentir mis manos apretándolas a través del brasier, “¿Quién iba a pensar que los próximos pechos que iba a tocar serían los míos? ¿Se sentirán mejor si los toco directamente?” pensé, mi curiosidad me hizo subir mi brasier, era la segunda vez que los veía, aunque la primera a detalle, los vi cuando me despojaron de mis prendas, pero por la situación del momento no les preste mucha atención, sin embargo, ahora no podía apartar la vista ellos, si bien no eran tan grandes como las de Jazmín, tenían un tamaño adecuado para mí, nuevamente puse mis manos sobre ellos “wow son tan suaves” podía sentir lo suaves que eran, y lo suaves que eran mis manos ahora, seguí viendo a Jeison y a Jazmín haciéndolo, esta vez no podía apartar mi vista de un punto en específico: si vagina siendo penetrada. Ver cómo entraba y salía el pene de las profundidades de Jeison me estaba excitando, lentamente dirigí mi mano a mi vagina...

Ahí estaba yo, tocando… una de mis tetas… con una de mis manos y mi…vagina… con la otra… se sentía muy bien, trataba de no gemir o sería atrapado, y no quería saber qué pasaría si era descubierto, entonces…

Una mano cubrió mi boca.

Será mejor que no hagas ruido -dijo Sasha-

Yo asentí con la cabeza, "mierda, me atraparon" pensé, fui descubierto, pero no por quien esperaba, Sasha me tiró al piso, levantó mis piernas y se acomodó…

jeje, mira nada más , me saliste toda una putita pervertida -dijo Sasha burlándose y bajando la voz-

No soy una ¡Ngh! -dije en voz baja antes de ser interrumpido por una extraña sensación en mi vagina-

Oye, oye, no levantes la voz, no querrás que sepan que lo estamos haciendo -dijo Sasha en voz baja mientras metía sus dedos en mi vagina-

Rápidamente puse mis manos en mi boca, luchando por mantenerla cerrada mientras sentía el placer de los dedos de Sasha revolcándose en mi interior.

Mira lo mojada que estás, eso significa que estás listo, más bien, lista -dijo Sasha viendo lo empapados que estaban sus dedos después de sacarlos-

*Sonidos de penetración*

¡Mmmmmmmmmmmm! -grité del dolor tratando de cubrir mi boca-

Oh, parece que eres virgen jeje -dijo Sasha al ver mi vagina sangrando-

"¿Era virgen?" pensé, tenía sentido, sabía que la primera vez de una mujer dolía, pero no pensé que tanto, tanto que las lágrimas por el dolor se deslizaron por mis mejillas, quería gritar "Sácalo" pero eso significaba hacer ruido, algo que no podía permitirme, no si quería evitar se atrapado.

Bien, me voy a mover lento para que ya no llores más -dijo Sasha burlándose y en voz baja-

Comencé a sentir como su pene se movía en mi interior, dolía pero... el dolor... poco a poco... fue transformándose... en placer...

Cuando menos me di cuenta Sasha había aumentado la velocidad y fuerza de sus embestidas, los gritos que estaba intentando contener, ya no eran de dolor, sino de placer, estaba luchando para evitar que mis gemidos salieran a luz,

¿Lo estás disfrutando? -preguntó Sasha con una sonrisa pícara-

Yo solo asentí con la cabeza nuevamente, soy un hombre pero estaría mintiendo si dijera que no lo estaba disfrutando, el placer de una mujer... tener un pene en mi vagina... se sentía tan bien... me estaba perdiendo en el placer femenino, podía sentir como su trozo de carne se deslizaba en mi interior ¡Tan bueno! 

Creo que voy a venirme, lo haré adentro -dijo Sasha-

Estaba tan sumergido en el placer que no le di importancia a su palabras, solo sentí el chorro de semen caliente siendo disparado en mi interior, cosa que me hizo llegar al orgasmo

¡Mmmmmmmmmmmmmm! --grité conteniendo mi voz-

Después de eso sentí como retiraba su pene dejando salir su espeso néctar de mi vagina…

Bien, ahora vamos por tu otro agujero, esta noche te voy a desvirginar por todas partes -dijo Shasha colocando su pene en el orificio de mi ano-

... Espera... ¿Qué...? -pregunté con una respiración irregular -

*Sonidos de penetración*

¡Aaaaaaahhhhhhhhhhhhhhh! -grité del dolor al sentir mi ano siendo penetrado-

Mi lucha por mantener cerrada mi boca fue en vano, el pene de Sasha abriéndose paso por mi recto fue todavía más doloroso y terminé gritando, pero fue extraño, el dolor fue transformado en placer rápidamente, pero era un placer más intenso que en mi vagina.

¡Oh, realmente estás apretando! -dijo Sasha mientras me daba duro por el ano-

¡Sí! ¡Se siente muy bien! ¡Ahh! dame más duro! -dije entre gemidos-

Me sentía tan bien que estaba gimiendo como toda una perra, sentir su leche caliente dentro de mí fue todavía mejor, una vez más retiró su pene ¡Dios! incluso eso fue placentero, supongo que ahora era realmente una mujer, me había dado por los dos agujeros, dolió tanto que no pude evitar llorar, pero se sintió tan bien que quería más…

Bien, ahora límpialo -ordenó  Sasha mientras se recostaba-

No lo pensé mucho... ya lo había tenido en mis labios inferiores… y en mi ano… “¿Por qué a pesar de saber donde estuvo lo quiero en mi boca?” me preguntaba mientras lo veía con lujuria... supongo que era el turno de mis labios superiores, caminé... más bien me arrastré como pude, la cogida de hace unos momentos entumeció mis piernas por completo, trate de levantarme pero solo terminé perdiendo el equilibrio…

Empecé a masajear con mis manos sintiendo lo pegajoso que estaba por mis jugos, después metí el glande en mi boca mientras cerraba los ojos tratando de imaginar que se trataba de una paleta.

Estaba sorprendido... Tenía un buen sabor para mi paladar... Entonces comencé a moverme hacía arriba y hacía abajo, sintiendo el duro miembro de Sasha por toda mi boca... sentía como poco a poco sus palpitaciones aumentaban a la vez que la velocidad de mis movimientos, finalmente se vino en mi boca... Y yo... me tragué su carga caliente... sabía salada... pero me gustó...

Después de hacerlo varías veces más, quedé completamente agotado... “¿Debería dirigirme a mí mismo como mujer?” me pregunté. no tenia una respuesta, pero después del sexo, era obvio que ya no era un hombre... así que sí, terminé agotada... solo vi como Jazmín volvía cargando a Jeison, dejándolo a un lado mío, igual de sudado que yo...  ¿o quizás deba decir sudada?... chorrando semen de su vagina al igual que yo...

Ambas nos vimos una a la otra, teníamos una mirada de satisfacción y anhelo por más, así fue la primera noche de este grupo de desconocidos en la isla…