Espero te guste.
Ah, la vida es tan injusta -decía Jules para sí mismo-
Jules era un adulto a punto de perderlo todo, la empresa que
había fundado con su propio sudor y sangre estaba a poco de ser arrebatado por
sus socios de trabajo quienes lo habían inculpado de varios fraudes, desde que
todo empezó ha estado encerrado en su penthouse sin poder hacer nada más que
esperar su injusta condena, y como si no fuera poco también se entero que Liz,
su mejor amiga, se iba a casar, esto era una estaca directo a su corazón pues
siempre estuvo enamorado de ella, incluso después de ser rechazado.
Todo parecía llegar a su final hasta que recibió un extraño
correo.
“Hola, veo que tu vida es una mierda, te gustaría empezar de
nuevo? Enmendar tus errores, cambiarlo todo? Si es así, da clic en la imagen”
Jules pensó que era alguna clase de estafa pero viendo su posición
y viendo que no tenia nada que perder entonces dio clic en la imagen, segundos después
escucho como el timbre de su puerta sonaba, era raro, no había pedido nada pero
su curiosidad lo hizo abrir la puerta.
Era extraño, no vio a nadie, solo una caja en el piso con su
nombre en un papel, la tomó algo nervioso, después recibió otro correo de la misma
dirección.
“Debes haber recibido nuestro paquete, dentro de la caja encontrará
un dispositivo, este le permitirá volver al pasado, solo tiene que imaginar la época
y la persona con la que más quiere estar en ese momento, por favor asegúrese de
leer el resto de las instrucciones antes de continuar, le deseamos un feliz
reinicio de su vida”
Jules no lo creía así que decido probarlo rápidamente, tomo
el dispositivo, parecía un pequeño control de televisión, entonces pensó a la época
donde quería volver, a la universidad, unos meses antes de confesársele a Liz, quería
volver a estar al lado de Liz.
Entonces el dispositivo comenzó a brillar y Jules fue absorbido
por lo que pareciera ser un agujero negro.
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Ah ¿Qué paso?... ¿Eh?... Mi voz… Suena distinta ¡Ah! ¡Y este
lugar!... ¡¿Tetas?! -decía Jules sorprendido-
Ante la sorpresa de su nueva voz, los pequeños bultos de
carne en su pecho y el lugar totalmente distinto donde estaba rápidamente se
par buscando un espejo, no podía creer lo que este reflejaba.
¡¿Liz?! ¡¿Soy Liz?! ¡¿Cómo es posible?! ¡Espera!... Esta casa… ¡Esta es la casa de Liz durante nuestro tiempo en la universidad! ¡No puede ser! ¡La fecha! ¡Debo ver la fecha! -gritaba Jules sorprendido-
Jules estaba aun más sorprendido la fecha indicaba que había
vuelto 23 años en el tiempo, pero no de la forma que esperaba, ahora se encontraba
en el cuerpo de su mejor amiga, quiso volver al presente pero el dispositivo tenia
en su pantalla un mensaje que anunciaba no tener pila y que tardaría una semana
en recargarse, Jules entendió que estaría en el cuerpo de Liz por una semana así
que no se preocupó por su situación, sabiendo que el dispositivo era un objeto importante
y algo que no podía permitirse perder lo guardo con mucho cuidado en una caja
dentro del armario.
Checo el día y los mensajes del celular de Liz, era sábado por
lo que no había que preocuparse por la universidad, además de que tendría una
salida con su yo del pasado más tarde por lo que aprovecho la mañana para hacer
lo que nunca pudo en el presente, jugar con el cuerpo de Liz, incluso busco en
su armario conjuntos para ponerse, aunque todos las prendas carecían de atractivo
sexual, aún así no pudo evitar sentirse excitado por vestir aquellas ropas, por
lo que empezó a jugar con sus tetas las masajeo, frotó y pellizcó, la sensación
de placer que emanaban de ellas era algo totalmente nuevo y adictivo para Jules
entonces continuó con su vagina, con solo pasar uno de sus dedos por aquella
hendidura su cuerpo se estremecía del pequeño placer, y sin poder resistirlo metió
uno de sus delgados dedos, fue tan placentero que no pudo evitar gemir,
queriendo todavía más empezó a usar el resto de sus mano hasta venirse.
Ah, eso se sintió muy bien… Sabes,
a pesar de tu rechazo, te seguí amando con toda mi alma, aunque también tenía
un poco de enviada de ti, eras muy popular, no sé cómo es que alguien como yo se convirtió
en tu mejor amigo… Así que, creo que usare esta oportunidad para convertirte en
una puta… ¡Serás mi puta personal!
Después de tan maravilloso placer
recupero sus sentidos, replanteo sus objetivos mientras permanecía en el
cuerpo de Liz y se arregló para su salida con el su yo del pasado.
Liz siempre fue una chica que gustaba
de lucir ropa bonita que no la hiciera parecer una zorra por lo que Jules tuvo que
ponerse un vestido con unas medias y tacones, esto último le costó pues nunca
en su vida había usado unos. De alguna forma se las arregló para poder caminar
sin caerse. Aunque después de regresar, su manera de vestir no sería la misma.
Por fin con su yo del pasado, fueron
a ver un partido de beisbol, entonces vio a su yo del pasado a punto de ir a
apostar, en cuanto escucho el nombre del equipo inmediatamente lo detuvo.
Jules, deberías apostar al equipo
contrario, creo que tienen mas posibilidades de ganar -decía Jules a su yo del
pasado-
¿Realmente lo crees Liz? -preguntó
Jules del pasado-
Si, confía en mí, es una corazonada
-dijo Jules del presente con una sonrisa en su rostro-
El Jules del pasado estaba
impresionado, por primera vez en su vida había ganado una apuesta, y no solo
eso, había ganado una gran cantidad de dinero así que le dio un fuerte abrazo a
Liz pero se despegó de ella a los pocos instantes con una cara enrojecida por
la vergüenza.
(Realmente soy patético) -pensaba
Jules del presente para sus interiores-
Con eso concluyó su cita, El
domingo fue aprovechado por Jules para comprar nueva ropa para Liz, tenia en
mente arruinar su reputación de santa y convertirla en la mas puta de la universidad,
aunque solo seria en vestimenta pues la única persona con la que tenia planeado
hacerlo era consigo mismo.
La semana inicio con Jules yendo a
la universidad en el cuerpo el cuerpo de Liz con un traje bastante revelador.
Si bien, la universidad no tenia normas de vestimenta la
ropa que usaba no podía ser considerad apta, por lo que fue sermoneado por
varios de sus maestros, le daba igual, quien perdía su reputación era Liz,
incluso comenzó a actuar cariñoso y juguetón con su yo del pasado, presionar
sus pechos contra su brazo, dejar caer un objeto enfrente de él y recogerlo
solo para dejar que vieras sus pantys, tocando su “paquete” de la nada, hacia
todo lo posible para tentar a su yo del pasado a actuar.
Finalmente paso la semana, pero Jules no estaba satisfecho
con los resultados, todavía no podía volver a su época, por lo que continuó
poseyendo el cuerpo de Liz…
Había pasado un mes, en ese mes la reputación de Liz estaba
por los suelos, los rumores sobre ella se esparcían rápidamente, la única razón
por la que seguía en la universidad era por sus excelentes notas, aunque
algunos decían que era por hacer “favores” a los profesores, las personas con
las que solía charlar se habían distanciado por lo mismo de su imagen, todos
menos uno, el Jules del pasado, su yo del pasado con el que Jules estuvo coqueteando
a más no poder, incluso se las arreglo para hacer que pusiera una mano sobre sus
pechos, pero no todo fue coqueteó, también le estuvo ayudando a ganar las distintas
apuestas en las que se había metido. Dentro de ese mes los fondos de su yo del
pasado aumentaron exponencialmente, se podría decir que había juntado al menos
la octava parte de lo que valía su compañía.
Por fin estaba satisfecho. Jules pensó que era hora de
volver al presente, pero no sin antes darle el mejor regalo de todos a su yo
del pasado, la virginidad de Liz.
Citó a su yo del pasado en casa de Liz, lugar donde su yo
del pasado llego a su limite al ver a Liz recibiéndolo sin nada de ropa y aunque
al principio le dolió por ser su primara vez, poco a poco el dolor se fue transformando
en placer, tanto que no pudo evitar gemir.
Después de varias embestidas ambos
llegaron a sus límites, consiguiendo así el orgasmo, Jules estaba impactado por
lo bien que se sentía hacerlo como una mujer, pensó que sería una sensación que
extrañaría cuando volviera al presente, sabiendo que era un placer único le pidió
a su yo del pasado volver a hacerlo, cosa a la que no se negó, los gemidos
llenaron la sala y el tiempo paso volando hasta caer dormidos.
O eso parecía pues Jules había esperado
a que su yo del pasado se durmiera para poder usar el dispositivo y regresar,
pero para su desfortunio este no estaba, preocupado busco por cada rincón del armario
pero nunca lo encontró, entonces el miedo se apodero de Jules, ¿Qué haría ahora?
¿Tendrá que vivir como Liz? ¿Podrá vivir cómo Liz después de lo que hizo con su
imagen? Esas y más preguntas surgían en la mente de Jules quien al no saber
como afrontar esta nueva realidad estallo en llanto.
Que Jules quedara atrapado en el
cuerpo de Liz tenía una explicación, y esta explicación estaba en los instructivos
del dispositivo, el dispositivo si bien te permite volver al presente, este
puede verse afectado por los cambios hechos en el pasado, por eso el dispositivo
envía la consciencia del usuario a un contenedor, permitiendo así que los cambios
realizados en el tiempo permanezcan y no creer un ciclo infinito dejando al
usuario en el cuerpo de la persona que poseyó.
Al haber ayudado por un mes a su
yo del pasado en las apuestas además de coquetear con él habían alterado
gravemente el presente ya que al haber conseguido grandes cantidades de dinero
hicieron que su yo del pasado dejara de pensar en abrir una empresa, cosa que
evito su traición y condena, evitando su encierro y destruyendo así el momento
donde usa el control, en otras palabras, la realidad donde usa el control ya no
existe, por lo que le control desapareció del lugar donde estaba guardado.
El llanto de Jules despertó a su
yo del pasado quien intento consolarlo, y Jules sin saber su fue por la situación
del momento o alguna otra razón le conto la verdad.
Vaya… Supongo que eso explica el
cambio de imagen y el coqueteo -decía el Jules del pasado sorprendido-
Si… Lo siento por estarte mintiendo
todo este tiempo -decía Jules con tristeza-
Mi futuro es una mierda… Oye… No
quieres embarrar aún más la imagen de Liz -Preguntó Jules del pasado con una
sonrisa malévola en su rostro-
¡No! ¡Ya manché demasiado su imagen!
¡Ni siquiera se que futuro me espera con la imagen de Liz ahora! -decía Jules
enojado-
No tienes que preocuparte por el
futuro, recuerdas las apuestas -dijo el Jules del pasado-
En ese momento ambos empezaron a reír
como locos, Jules sabia que con las apuestas no tendría que preocuparse por el
futuro, así que desecho la poca imagen salvable de Liz.
Desde entonces Liz se volvió la exhibicionista
de la universidad, ya fuese al aire libre
En el gimnasio
O en el centro de entretenimiento
Podías encontrarla sin ropa, esta
actitud molestó demasiado a el personal administrativo por lo que fue expulsada,
pero no le importo, con las apuestas tenía su vida hecha.
El Jules del pasado se graduó de
la universidad mientras que El Jules del presente en el cuerpo de Liz desarrolló
una dependencia total de su yo del pasado.
El tiempo paso, el Jules en el
cuerpo de Liz se volvió adicto al placer femenino, además, la fortuna con las apuestas
de ambos era enorme, querían una vida tranquila así que compraron varios
departamentos para rentarlos, aunque algunos clientes eran incomodados por la
pareja amorosa que lo hacía incluso en la recepción, pero no les importo, el dinero
no era un problema.
Desde entonces vivieron así hasta llegar a lo que era el presente.
Espera no entiendo es un final bueno o es uno malo? XD
ResponderBorrarNeutral bueno xd
BorrarMhhh interesante historia, si le hubiera tocado a un oervertido inteligente solo se hubiera masturbado esperar que se recarge el control y volverlo a usar XD
ResponderBorrarQuizás, pero ese final no era una opción
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