De millonario rebelde y problemático a maestra candente

 Quinta petición. Gracias por tu apoyo y espero te guste

Miguel (22) era un estudiante de universidad, era el típico niño de papi al que le valían los estudios, capitán del club de futbol, aprovechaba su posición social para intimidar a los demás, se saltaba clases, les respondía a los profesores, etc. La única razón por la que se le permitía seguir estudiando era la donación que hacia su padre a modo de disculpas por el mal comportamiento de su hijo.

Profesor de ciencias: ¡Miguel ya te he dicho que dejes de ver la ventana y pongas atención!

Miguel: Tranquilícese anciano, solo miro la hermosa vista 

Profesor de ciencias: ¡Si tanto aprecia la vista lo invito a irse para que pueda apreciarla mejor!

Miguel: ¡Que buena idea anciano!

Inmediatamente Miguel quiso intentar algo que había visto en una película reciente, se levanto de su asiento, poso un pie en la ventana y salto del edificio…

Para mala suerte de Miguel se le olvido que estaba en el segundo piso y al ser la primera vez intentándolo su cuerpo le jugo una mala pasada haciendo que, en vez de caer de con la suela de los pies cayera de cabeza, justo entonces iba pasando la maestra Beatriz (35) haciendo que chocaran sus cabezas.

Ambos cayeron inconscientes y el personal preocupado por como reaccionaria el padre de Miguel llevaron a ambos rápidamente la enfermería de la escuela y ocultaron el accidente de su padre bajo la mentira de que se quedaría por practicas intensivas del club, pasaron la mayor parte del día en reposo hasta que…

Miguel: Au… Mi cabeza… me duele un poco… ¿Ah? ¿Dónde estoy? ¡Momento! ¡Mi voz!... ¡Es diferente! 

Rápidamente se levantó de la cama, sintiendo así el nuevo peso en sus pechos.

Miguel: ¡Ah! ¡¿Por qué tengo pechos?! ¡Espera!... ¡Eso significa!

Miguel rápidamente dirigió su mano a su entrepiernan.

Miguel: ¡Un! ¡Un hilo!... ¡No está!

Para su sorpresa se encontró vistiendo un hilo por ropa interior solo para notar la ausencia de su pene. Miguel asustado decidió mirar a su alrededor en busca de pistas, entonces se di cuenta de que estaba en la enfermería y algo más…

Miguel: ¡Ese! ¡Ese es!... ¡¿Mi cuerpo?! Entonces… ¡¿En el cuerpo de quien estoy?! ¡¿Y quien está en mi cuerpo?!

Después de eso Miguel se levantó de la cama, pero inmediatamente perdió el equilibrio y tropezó.

Miguel: ¿Ta-Tacones?... no sé ni me interesa usarlos, será mejor que me los quite.

Aunque batallo, Miguel logró quitarse los tacones, sin embargo, todavía no se adaptaba a su nuevo centro de gravedad así que tuvo que arrastrase por la habitación mientras usaba distintos muebles como punto de apoyo. Finalmente encontró lo que estaba buscando; un espejo.

Miguel: Tiene que ser una broma ¿Cierto? ¡No puedo ser la puta de la maestra Beatriz!

Miguel estaba aturdido por tal revelación.

La maestra Beatriz era una excelente maestra de español, aunque también era famosa por vestir ropa algo provocativa, no había alumno o profesor que no quisiera llevarla a la cama o bajarle sus bragas en plena clase, aunque también había rumores de que tenia relaciones con el director pues nadie veía posible que una maestra pudiera vestir de forma tan provocativa sin recibir algún tipo de sanción.

Justo ahora traía puesto un vestido de una sola pieza color negro con puntos blancos que dejaba una abertura entre las piernas, unas bragas rojas, unas medias y tacones, si uno jugaba bien sus cartas tendría la fortuna de ver las sexis pantis rojas de Beatriz.

Beatriz no era para nada tonta ella, cada movimiento que hacía estaba planeado con el objetivo de llamar la atención de sus alumnos, pero mantenerlos a raya, sabia lo tontos que eran los hombres y lo fáciles que eran de manipular si usaba el conjunto adecuado, incluso el director había caído en sus sucios juegos, sin embargo, a pesar de ser tan codiciada nunca fue tocada.

Poco después Miguel se recuperó de la sorpresa e inmediatamente se llevó otra…

Beatriz: ¿Ah? ¿Por qué me veo a mi misma? ¿Eh? ¡Mi voz! ¡Y mi ropa! ¡Eh! ¡¿Y mis niñas?!

Beatriz al igual que Miguel dirigió su mano a su entrepierna encontrándose así con el órgano masculino de su nuevo cuerpo

Beatriz: ¡¿Soy un hombre?! ¡No! ¡No! ¡No! ¡Esto no puede ser verdad! ¡No quiero ser un sucio animal!

Miguel: ¡Oiga! ¡Eso es cruel! ¡En especial para mi bien formado cuerpo!

Dijo Miguel acercándose mientras señalaba con el espejo que encontró a Beatriz.

Beatriz: ¡¿Soy el estúpido de Miguel?! Espera… Miguel… ¿Tu estás en mi cuerpo?

Miguel: … Al parecer…

Beatriz: ¡Esto no puede estar pasando! ¡Un sueño! ¡Si esto tiene que ser un sueño!

Miguel: ¡Contrólese puta!

¡Pam!

Al escuchar tal insulto Beatriz actuó por instinto y le dio una cachetada, pero al no medir su nueva fuerza como hombre le dio una más fuerte de lo esperado, por otro lado, Miguel quien nuca recibió un golpe en su vida gracias su riqueza, por primera vez en su vida experimento el dolor, y al ser una mujer este se intensifico aún más, incluso cayó de nalgas y  a pesar de querer contener las lagrimas no pudo evitar que se resbalaran por sus mejillas, un nuevo sentimiento nació para Miguel, el miedo, el miedo a ser golpeado otra vez.

Beatriz: ¡Lo siento! ¡Yo no-

Miguel: ¡No! ¡Fui yo quien no debió insultarla! ¡Disculpe mi mal comportamiento!

Por primera vez en su vida Miguel se estaba disculpando.

Una vez se calmaron ambos discutieron sobre la forma de volver a sus cuerpos.

Miguel: ¡Lo tengo! ¡si volvemos a chocar cabezas posiblemente cambiemos de cuerpos!

Beatriz: ¿Estás seguro de eso?

Miguel: ¡Si! ¡Debe ser eso! ¿Qué más podría ser?

Beatriz: No lo sé, no quiero dañar mi cuerpo

Dicho eso Miguel tomo la iniciativa y dio el cabezazo, pero solo fue recibido por una fuerte sensación de dolor.

Beatriz: ¡Niño estúpido! ¡No hagas nada que maltrate mi cuerpo! 

Miguel: ¡Lo siento!... duele…

Entonces ambos escucharon la puerta abrirse

Doctor: Ah, me alegra ver que ambos están despiertos, por poco no la libramos, quien sabe lo que nos haría tú padre Miguel si se entera de que saltaste desde el segundo piso. Bueno, ya casi anochece, deberían ir a casa ¿mm? ¿Están bien? Parece que el golpe todavía esta hinchado

Miguel: ¡E-Estamos bien!

Beatriz: ¡Si! ¡S-Solo nos caímos de la cama y nos dimos en la frente!

Doctor: ¿Los dos?

Miguel: ¡S-Si!

Doctor: De a~acuerdo… ninguno debería tener algún problema, igual si surge alguna emergencia pueden llamarme, bueno, pueden retirarse, entonces disfruten sus vacaciones.

Justo como menciono el doctor, hoy era el último día de clases, dando inicio a las vacaciones de semana santa, Miguel e Beatriz no les quedo de otra mas que retirarse, no sin antes intercambiar números entre ellos para mantenerse comunicados, poco después cada uno se subió a sus respectivos autos, Miguel tomo el auto ultimo modelo de la maestra Beatriz, mientras que ella tomo el deportivo de Miguel, y así cada uno partió a casa del otro.

Justo cuando llegaron a la casa del otro fue donde comprendieron mas el estilo de vida del otro, Beatriz vio el triste estilo de vida de Miguel, sus padres nunca estaban en casa, por lo que compensaban su ausencia dándole regalos caros, tenía una sirvienta, pero ella solo se encargaba de limpiar y hacer la comida por lo que entendió que Miguel carecía de afecto paternal, no solo eso, también encontró su cuaderno de notas, donde conforme pasaba las hojas estas se volvían más desesperantes. 

Mientras tanto Miguel vio que la vida de su maestra no era muy diferente a la suya, Beatriz vivía sola, pero él se llevó la sorpresa de sus cuadernos de notas con todos los datos que ha recolectado acerca de sus alumnos y compañeros de trabajo.

Miguel: Quien diría que el director engaña a su esposa con la de inglés, con razón deja que la puta de Beatriz vista como quiera… esta información puede ser útil para cuando vuelva a mi cuerpo… debería leer todo lo que pueda

Con eso en mente Miguel empezó a leer el cuadernillo, pero recordó que tenía que cambiarse así que se quito el vestido solo para ver la hermosa figura de Beatriz.

Miguel: Sabia que esta puta era hermosa, pero no pensé que tanto… estas tetas no están nada mal, espero no le moleste a la puta de Beatriz si miro mas de cerca su cuerpo, dudo que se entere.

Entonces Miguel bajo el brasier permitiendo así que viera los senos de Beatriz, después comenzó a manosearlos quedando sorprendido por la sensación que recibía de acariciar sus nuevos y sensibles pezones femenino.

Miguel: ¡Ah! ¡¿Qué es este placer?! ¡Se siente tan bien!... mi vagina… siento algo de calor en ella…

Cediendo ante las nuevas sensaciones Miguel no pudo evitar llevar sus manos hacia la vagina de Beatriz donde fue aun más sorprendido por lo mojada que estaba y el placer que sentido por el simple roce de sus dedos, rápidamente los retiro, pero viendo lo pegajosos que estaban por los fluidos que salían de su vagina, el placer del simple roce y que su vagina pareciera tener vida propia pues señita como si le pidiera más termino metiendo uno de sus dedos.

Miguel: ¡Ah! ¡Se siente bien! ¡Más! ¡Quiero más!

Al parecer sus dedos no eran suficiente, así que intento buscar entre las cosas de Beatriz esperando encontrar algún consolador o juguete sexual que le ayudara a satisfacer su lujuria, pero no encontró nada por lo que su único instrumento de satisfacción fueron sus finas y pequeñas manos, le costó trabajo pero finalmente logró llegar al orgasmo, e impresionado de que el placer perdurara y que a diferencia del hombre, una mujer podía experimentar un orgasmo tras otro siguió jugando con su cuerpo hasta caer dormido…

A la mañana siguiente fue despertado por el tono de llamada de su celular.

Miguel: ¿Ho-Hola? 

Beatriz: ¡Migue cariño! ¿Cómo amaneciste? ¿Disfrutaste jugar con mi cuerpo?

Miguel: ¿Cómo sabe de?

En ese momento Miguel despertó completamente y un escalofrió recorrió su columna vertebral, de solo pensar seria golpeado nuevamente hacia que su cuerpo temblara de miedo.

Beatriz: Llámame loca, pero tengo instaladas cámaras ocultas por toda la casa, como ya viste mis notas sobre mi trabajo no puedo dejar que nadie se entere de tal cosa, mi vida estaría acabada si alguien se enterara, no te preocupes, no estoy enojada, bueno tal vez un poco, pero oye, yo hice lo mismo mientras te observaba desde mi celular, nunca pensé que mi cuerpo fuera tan sexi, por cierto, voy para allá, espero te guste tu nuevo estilo.

Después de eso colgó. Miguel algo confundido y asustado por las palabras de su maestra decidió cambiarse, odiaba vestir la ropa ajustada de su maestra así que intento buscar prendas mas cómodas, lo menos pero que pudo encontrar fue un pantalón de mezclilla junta con una camisa de resaque, no quería usar brasier, pero la molesta sensación de sus pezones rozando contra la camisa no le dejo alternativa.

¡Ding dong!

El timbre sonó, eso significaba que Beatriz había llegado, a pesar de estar un poco temeroso Miguel se dirigió a la puerta.

Beatriz: ¡¿Por qué estás vestido así?!

Miguel: ¿Yo? ¡Mira lo que me estas poniendo, parezco un maricon con esas ropas!

El temor de Miguel se transformó en ira al ver a Beatriz vistiendo su cuerpo con una playera corta y ajustad que dejaba ver la parte inferior de sus pectorales, unos pantalones mostaza igual de ajustado y de su parte superior salía un par de hilos a los lados dando a entender que estaba usando una tanga.

Beatriz: ¡Cállate niño estúpido con falta de amor paternal! ¡Deberías agradecer que le di un cambio de aires a tu imagen! ¡Antes de criticarme deberías arreglar mejor el estilo con el que me vistes!

Miguel: ¡Estúpida puta! ¡Está arruinando mi imagen! ¡Es mejor vestir de una manera decente que parecer una zorra!

¡Pam! 

Nuevamente Miguel fue abofeteado, ahora de una manera más “leve”, sin embargo, la sensibilidad del cuerpo femenino no le ayudo en mucho.

Beatriz: ¡Escúchame bien niño! ¡No soy una zorra! ¡Es parte de mi estrategia de obediencia! Los hombres son tan estúpidos, por solo ver un poco de piel se excitan y siguen ciegamente a una mujer ¡No voy a dejar que arruines todo lo que he construido! 

Miguel: … Entendido

Pasaron el resto de la tarde y las vacaciones aprendiendo uno sobre el otro, Miguel tuvo que memorizar las debilidades de sus compañeros, el único apunte que no se le permitió ver fue el suyo, también fue obligado a usar ropa ajustada y reveladora, aunque quería quitársela en cuanto Beatriz se fuera no podía por las cámaras ocultas, también hubo momentos donde decidía ignorarlas y hacer de las suyas, la única razón por la que Beatriz dejaba pasar tal comportamiento es por que usaba su propio cuerpo como material pornográfico para satisfacer las necesidades de un hombre.

Terminaron las vacaciones, era hora de retomar las clases, Miguel con su todavía espíritu rebelde decidió dar una sorpresa tanto a Beatriz como a sus grupos, se puso un conjunto que mostraba una imagen algo de descargable de Beatriz, pareciera que nunca fue una sexi maestra de español, parecía una vagabunda, con tal imagen se dirigió a la escuela emocionado por ver cómo reaccionarían los alumnos y la mismísima Beatriz.

Eso pensó, pero fue interceptado por Beatriz unas cuadras antes, lo abofeteo y lo amenazo con no poder volver a su cuerpo, pues al parecer Beatriz encontró una manera de volver, pero no se la revelaría a Miguel hasta el final del día. Después de eso, saco una camiseta blanca de manga larga junto con una falda negra corta, un collar, aretes y tacones.

Miguel: No voy a ponerme eso

Beatriz: Entonces no voy a devolverte tu cuerpo ¿Enserio crees que voy a querer regresar con una reputación de maestra desarreglada?

Miguel: ¡Bien! Pero me dirá lo que sabe después de clases

Beatriz: Solo si te comportas

Miguel cambio su vestimenta, a pesar de haberse acostumbrado a los conjuntos candentes de Beatriz sentía algo extraño en este último, lo sentía un poco más apretado que otras prendas, como si hubieran reducido la ropa en una talla.

Una vez arreglado, ambos se dirigieron a la escuela uno después del otro para despistar, las clases comenzaron como cualquier otro día, exceptuando por el nevo estilo de “Miguel” y aunque querían insultarlo no podían por las consecuencias que habría después de sus actos.

Miguel dio las clases casi como si fuera la verdadera Beatriz, conocer las debilidades de sus alumnos más el traje que traía puesto realmente le daban la razón a la ideología de Beatriz, no tuvo ningún problema hasta que le toco el grupo donde estaba su verdadero cuerpo, ahora poseído por Beatriz.

Beatriz se cobró todas las veces que Miguel mostro una actitud engreída y arrogante, inicio coqueteando con sus compañeros, hubiera sido normal si no fuera porque sus coqueteos estaban dirigidos a sus compañeros masculinos, luego aventándole papelitos a la maestra, interrumpiendo la clase con mensajes de famosos en las redes sociales. 

Al final, Miguel termino por explotar, sin embargo, al ver el rostro malicioso de Beatriz lo único que pudo hacer fue decirle que lo vería después de que acabarán las clases, cosa que sorprendió a todos pues es algo que ni la verdadera Beatriz había hecho antes. Ella solo daba la clase por concluida y encargaba tarea.

Las clases concluyeron y ambos se reunieron en la sala de maestros, el resto de los maestros se había ido temprano pues no querían estar ahí para presenciar la ira de “Miguel”

Miguel: ¿No tienes algo que decir?

Beatriz: ¿Qué? ¿Debo disculparme?

Miguel: ¡Eso no! ¡Zo!.., Bea,,, Maestra Beatriz… Ya sabes, sobre como regresar a nuestros cuerpos.

Beatriz: ¡Oh! Claro, entre mis tantas búsquedas por fin encontrar una fuente fiable, o eso parece, se trata de una gitana, hace brujería y esas cosas, hable con ella, dice que puede cambiarnos.

Miguel: ¡Bien! ¡entonces vayamos rápido! ¡Ya no quero estar en este cuerpo ni mucho menos dar clases!

Beatriz: ¡No tan rápido niño!

Miguel: ¡¿Qué?!

Beatriz: ¿No tienes curiosidad por tener sexo?

Con eso dicho Beatriz desarreglo la camiseta de Miguel y subió su falda







Después de hacerlo ambos se marcharon de la escuela, con la ligera diferencia de que a Miguel le costaba un poco caminar, parecía caminar algo chueco.

Al día siguiente fueron con la gitana, pero el local estaba cerrado debido a “fuerzas sobrenaturales” o eso decía el cartel que también anunciaba que abriría dentro de una semana, por lo que tendrían que estar otra semana así, la cual aprovecharon para coger y disfrutar del adicto placer de hacerlo como el sexo opuesto.

Paso la semana, ambos volvieron al local de la gitana, quien los recibió un poco preocupada.

Gitana: ¡Oh cielos! ¡Están metidos en un gran problema! ¡Me temo que no puedo ayudarlos! ¡Mi magia no puede atentar contra la vida!

Miguel: ¿A qué se refiere anciana?

Beatriz: ¡Migue! Discúlpelo ¿Podría explicarnos por favor?

Gitana: Me temo que el muchacho en su cuerpo está creando vida

Miguel e Beatriz: ¡¿Qué?! 

Gitana: Como lo acaban de escuchar, ese muchacho esta creando su vida en su vientre, hacer el cambio puede ser peligroso para esa pequeña fuente de vida.

Miguel: ¡¿Qué vamos a hacer ahora?! ¡No quiero ser una mujer para siempre!

Gitana: Oh no es para siempre… solo tienen que esperar nueve meses.

Beatriz: … Entendido… Muchas gracias por su ayuda…

Miguel: ¿Cómo puedes estar tan tranquila? ¿No quieres volver a tu cuerpo?

Beatriz: Tranquilo Miguel, Ten, toma algo de agua.

Beatriz saco una botella de agua de su bolso y se la dio a Miguel, sin sospechar la bebió, cosa que no debió hacer pues cayo profundamente dormido.

Beatriz agradecían nuevamente a la gitana y cargo a Miguel hasta su auto para después llevarlo a casa…

Después de varias horas Miguel despertó en casa de Beatriz, ahora su casa, preocupado por lo que recordó busco su celular, pero no lo encontró, en su lugar encontró el de Beatriz, este tenía un mensaje:

Cuando te despiertes y leas esto, márcame.

Era su antiguo número, con algo de miedo Miguel marco a su número.

Beatriz: Hola Miguel… O debería decir maestra Beatriz…

Miguel: ¡Beatriz! ¡Maldita perra! ¡¿Qué hiciste?!

Beatriz: ¿Beatriz? Pero si ese es su nombre maestra Beatriz, yo soy Miguel, continuando, la deje embarazada y realmente no esta en mis planes criar un bebe así que me largo al extranjero, pero eso no significa que este a favor del aborto, no se preocupe maestra Beatriz, cubriré todos sus gastos, después de todo soy millonario, no es nada de lo que tenga que preocuparme, y usted, usted tendrá a ese bebe, si se niega no me importaría mostrar el video donde coge conmigo, pero eso arruinaría su carrera… y posiblemente su vida, para evitar que la verdad salga a luz diga que fue inseminada, conociendo su personalidad y su ideología nadie dudaría de tal acción, incluso es libre de renunciar a su trabajo, pero va a tener a ese bebe. Adiós

Entonces la llamada termino y un mensaje sonó en su celular, era del banco, habían depositado una gran cantidad de dinero.

Ahora Miguel estaría atrapado como su maestra y tendría un bebe, esperemos se adapte a su nueva vida siendo su única ventaja la despreocupación por el dinero.



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